"La utilización de vacunas en los peces ha reducido al mínimo el de antibióticos"

"La acuicultura puede tener mala fama, pero una ternera es de granja y no se dice lo mismo"

alicia estévez Toranzo científica especializada en ictiología y premio pontevedreses de investigación Catedrática de Microbiología en la Universidade de Santiago, Alicia Estévez Toranzo coordina un grupo de investigación sobre patologías de peces y moluscos de acuicultura que es una referencia a nivel mundial. También ejerce como docente en la Facultade de Bioloxía, donde es testigo del creciente interés del alumnado por seguir sus pasos
Toranzo, en su laboratorio del Centro de Investigacións Biolóxicas de la Universidade de Santiago (Cibus)
photo_camera Toranzo, en su laboratorio del Centro de Investigacións Biolóxicas de la Universidade de Santiago (Cibus)

Alicia E. Toranzo (Pontevedra, 1955) recibió con sorpresa la distinción que la convierte en uno de los XI Premios Pontevedreses, concedidos por Diario de Pontevedra y que se entregarán el próximo 4 de mayo en el Auditorio de Afundación. Como científica especializada en patologías que afectan a los peces, el suyo corresponde al ámbito de la investigación. "Me hizo mucha ilusión. Al fin y al cabo soy pontevedresa".

¿Mantiene relación con la ciudad a pesar de vivir y trabajar en Santiago de Compostela?
Mis padres murieron hace dos años, pero hasta entonces iba todos los fines de semana a Pontevedra y todavía voy a cada paso. Allí estudié toda mi infancia y adolescencia. En Las Doroteas y en el Instituto Femenino, en aquella época, ahora el Valle-Inclán. Fui de la primera promoción de COU, que se hizo de forma experimental.

¿En esa época ya tenía claro que iba a dedicarse al mundo de la ciencia?
En COU, precisamente, tuve un profesor de Biología muy bueno, que ponía tanta pasión por la materia que me indujo a decantarme por estudiar la carrera. Simultáneamente hice la de Farmacia, que terminé dos años después, y también tengo la cátedra de Microbiología.

"Existe la inercia de que entren más hombres que mujeres en la RAGC pero poco a poco se irá incorporando alguna más"


En 2014 ingresó en la Real Academia Galega de Ciencias (RAGC) junto con María José Alonso y desde entonces continúan siendo la única representación femenina.
En 2015 se incorporó una profesora del Instituto de Ciencias Marinas de Vigo, Aida Fernández, que desgraciadamente falleció en un accidente. Solo quedamos dos.

¿Y a qué se debe esto? ¿No hay méritos suficientes o en el fondo no es una cuestión de género?
Hay méritos suficientes, sin duda, pero aún hay inercia de que entren más hombres que mujeres, pero poco a poco se irá incorporando alguna más. En todas estas instituciones los cargos son vitalicios y hasta que queden sillones vacantes no se puede proponer otra académica nueva. La incorporación de mujeres a la RAGC va lenta, pero por algo se empieza.

Desde su punto de vista como docente, ¿ve interés por seguir investigando o las nuevas promociones de científicos están desanimadas por los recortes?
El problema de los recortes creo que está pasando, afortunadamente. Creo que hay mucho interés, porque, de hecho, los alumnos tienen que hacer el trabajo de Fin de Grao y cada vez hay más solicitudes para hacerlo experimental en los distintos grupos de investigación. De hecho, no podemos atender todas las solicitudes por falta de tiempo para tutorizar a todos estos estudiantes.

"Las oportunidades aumentan, pero la estabilidad es difícil; los investigadores pueden llegar a los 40 años con becas"

¿Y este interés se traduce en recompensa a nivel profesional o sigue habiendo mucha emigración en el mundo de la investigación?
Sigue habiéndola porque ¿qué perspectivas tienen nuestros jóvenes de quedarse? Las oportunidades están aumentando, pero a costa de becas del Ministerio o de la Xunta, y el problema es la estabilidad. Las plazas en la Universidad son muy pocas y se puede llegar a los 40 años con becas o contratos por proyectos. La estabilidad que hace 15 o 20 años era más fácil ahora es muy compleja. Los contratos buenos, como los Ramón y Cajal, son habas contadas para la cantidad de buenos curriculums que hay en España.

Usted es experta en patologías que afectan a animales acuáticos. ¿En qué proyecto trabaja en la actualidad?
Estamos llevando a cabo un proyecto con la empresa Stolt Sea Farm, que se dedica a la cría de rodaballo y lenguado, para mejorar las vacunas que se están utilizando en el cultivo de lenguado y desarrollar otras nuevas.

La acuicultura tiene un peso importante en la economía gallega. ¿Compite con la extracción pesquera a ojos de la sociedad?
Ese es un problema que la sociedad tiene que erradicar. Son dos productos diferentes. La acuicultura tiene que continuar y la pesca extractiva también. Son dos actividades que se complementan. Para paliar el hambre en el mundo la acuicultura debe seguir desarrollándose. El pescado cultivado no es de peor calidad. Está totalmente controlado, mientras que el de pesca extractiva puede ser bueno o no. Este tiene buena calidad nutritiva y sanitaria porque está controlado. La acuicultura puede tener mala fama, pero una ternera o un pollo también son de granja y no se dice lo mismo.