Ni el sol de justicia que golpeaba con fuerza a las doce del mediodía ni las demás citas festivas que se desarrollaron en otros puntos de la comarca consiguieron restar afluencia a los actos de Corpus Christi celebrados en la ciudad de Pontevedra.
Cientos de ciudadanos salieron a las calles para participar en los oficios religiosos o, simplemente, para contemplar el paso de la procesión y las alfombras florales con las que se cubrieron tanto la plaza de A Ferrería como el entorno de Santa María. El trabajo realizado a lo largo de la semana y durante la madrugada de ayer por los voluntarios que se encargaron de confeccionar los tapices naturales fue admirado no solo por los vecinos, sino también por los visitantes procedentes de otros municipios.
El alcalde en funciones y otros miembros de la Corporación municipal y provincial se unieron a los actos que comenzaron en San Roque
En lo que respecta al desarrollo de la jornada, las actividades comenzaron en la capilla de San Roque, donde el Gremio de Mareantes invitó a la tradicional Parva de Corpus, un tentempié compuesto por una copa de caña y un pedazo de pan de maíz para coger fuerzas con las que afrontar el resto del día. Varios miembros de la Corporación municipal en funciones (entre ellos el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores; la concejala Carmen Fouces; los ediles del PP María José Rodríguez Teso, Eloisa Nogueira y Miguel Meijón), así como la diputada provincial en funciones Ana Isabel Vázquez, fueron algunos de los que participaron en el brindis con el presidente del colectivo anfitrión, José Luis Arellano.
A continuación, salió la comitiva desde San Roque con las insignias del Santísimo, San Miguel y el Teucro y con las imágenes de los patronos del Gremio de Mareantes, San Telmo y San Miguel. Una banda de gaitas acompañó la marcha religiosa hasta la puerta de la Basílica de Santa María la Mayor.
MISA SOLEMNE. En este otro templo tuvo lugar la misa solemne, que comenzó a las 11.00 horas y fue presidida por el obispo auxiliar de Santiago, Jesús Fernández González. A su término, sobre las doce del mediodía, salió la procesión con el Santísimo para recorrer varias calles y plazas del centro de la ciudad. El desfile, en el que participaron autoridades y varios niños que recibieron la Primera Comunión, se inició en la Avenida de Santa María y continuó por la calle Michelena, la plaza de A Peregrina, el Paseo de Odriozola y A Ferrería, donde tuvo lugar un nuevo acto eucarístico. Este fue, de hecho, uno de los puntos más concurridos, pues numerosos ciudadanos se dieron cita en esta plaza para contemplar tanto la alfombra floral como el evento religioso. Sin embargo, la procesión no se detuvo aquí, sino que siguió hacia Pasantería y la calle Sarmiento, para finalizar en la iglesia de San Bartolomé.
