La reforma del polideportivo de Campolongo acabará a finales del año que viene

El Concello pondrá hasta un millón de euros para evitar que la obra quede desierta ► El presupuesto total será de 3,5 millones
Imagen de este viernes de la entrada a las piscinas de Campolongo
photo_camera Imagen de este viernes de la entrada a las piscinas de Campolongo

La reforma integral del complejo deportivo de Campolongo sale del cajón. El portavoz municipal, Raimundo González Carballo, informó este jueves de que el Concello ya tiene en sus manos el plan de viabilidad que determinará el coste y las características de las obras. El estudio, que ha vuelto a rehacerse y del que se ha encargado una empresa externa, introduce varios cambios con respecto al realizado con anterioridad. El más importante tiene que ver con la financiación.

El Concello asumirá con fondos propios casi un tercio de la obra, cuyo presupuesto de licitación será de 3,5 millones de euros. De esta cuantía, Pontevedra pondrá hasta un máximo de un millón de euros. Y lo hará con un único objetivo: garantizar que el contrato de mejora del centro, que alberga las únicas piscinas públicas de la ciudad, despierte el interés de las empresas y no quede desierto.

Esta opción de financiación público-privada tendrá letra pequeña. Las firmas que pongan más dinero de su bolsillo para ejecutar los trabajos obtendrán más puntos en el proceso de adjudicación, que incluye la reforma de todo el recinto y su gestión y explotación futura. De esta manera, el impacto económico en las arcas locales podría ser inferior al millón de euros.

Otro de las modificaciones del estudio de viabilidad, que se rehizo con motivo de los cambios legales en materia de contratación a nivel estatal, afecta a la duración de la concesión. La empresa que se haga con el contrato dirigirá el complejo de Campolongo durante 20 años y no 40, como recogía el anterior plan.

¿QUÉ CAMBIARÁ? Las obras, que tendrán un plazo de ejecución de seis meses, serán las mismas. Entre ellas figuran la ampliación y reforma del sótano con la eliminación de las salas existentes y la de squash para crear un espacio para fitness de 505 metros cuadrados y cuatro salas de actividades, una de ellas en la planta de acceso.

También está prevista la renovación de los equipos de climatización, calefacción y depuración de las instalaciones actuales, además del saneamiento y forjado del techo, que se corresponde con la pista polideportiva existente. Además se cambiarán los vasos de las piscinas y la cubierta, así como todos los suelos. En materia de accesibilidad, el centro será dotado de un ascensor.

LOS PLAZOS. La rehabilitación de las piscinas de Campolongo será una realidad a finales de 2018. Así se desprende del calendario que se ha impuesto el propio Concello, que confía en que "en oito ou nove meses" el proyecto esté adjudicado y puedan iniciarse las obras, que durarán seis meses. En principio, se tratará de que gran parte de los trabajos coincida con el verano, que es la temporada con menor nivel de usuarios. De esta forma se evitarán las molestias que genere el cierre temporal de la instalación.

El plan de viabilidad será el paso previo a la elaboración del estudio de explotación, que ya se está tramitando. Este último documento fijará, entre otras cuestiones, si la empresa que se haga cargo de las obras y de la gestión del recinto tendrá que pagar o no un canon anual al Concello, al igual que ocurre en la actualidad.

Para llevar a cabo el proyecto, el Gobierno local aprobará este viernes la novena prórroga del contrato de Serviocio, la empresa que dirige el complejo deportivo. La ampliación de la concesión será, como máximo, de un año: hasta el 30 de junio de 2018. Si el concurso para la reforma de las piscinas de Campolongo se resuelve antes, la moratoria finalizará.

"O atraso foi substancial", reconoció este jueves González Carballo, que vinculó la demora de las obras a distintos "avatares". "Os malos farios determinaron os atrasos", insistió.

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