Unos labios, con detalles carmín, compuestos por una serie de módulos que el creador mallorquín Alberto Andrés realizó, en 2012, con la colaboración de los alumnos del Curso Internacional de Cerámica de Pontevedra, ocupan, desde este jueves, un espacio central en el patio del CIFP A Xunqueira de Pontevedra. "Me apetecía mucho trabajar en un formato grande y poder hacerlo junto a los participantes del curso fue una maravilla", explicó el artista, que intervino en la inauguración de la pieza, vía telefónica, desde Palma de Mallorca.
La coordinadora del Curso de Cerámica, Xela Area, fue la encargada de conducir el acto, realizado precisamente en el instituto que acogió las últimas ediciones de la actividad. Rodeada de exalumnos, colaboradores, representantes del centro de A Xunqueira (que anunciaron su intención de realizar algún tipo de actividad con los alumnos, para que conociesen el contexto en el que se había realizado la obra) y de la asociación Alba, entre otros, Area recordó que el Curso Internacional de Cerámica deja de celebrarse precisamente en el año en el que llegaba a su vigésima edición.
SILVIA ZOTTA. El Concello explicaba esta semana que prescindía de la propuesta porque "as programacións de verán evolucionan e desaparecen actividades, como esta, que levaba moitos anos, para poder priorizar outras".
La de Alberto Andrés, que, según explicó el artista, está enmarcada en su serie Carne cruda, es la segunda pieza del curso que se queda en el CIFP A Xunqueira. Precisamente este jueves también se aprovechó para colocar una placa conmemorativa en la otra: un mural de la argentina Silvia Zotta realizado en 2009. Otras obras realizadas dentro de la propuesta, como una escultura de Paul Soldner, están depositadas en el Castelo de Soutomaior.
#EnVídeo 📹 Inauguración no CIFP A Xunqueira dunha escultura de Alberto Andrés realizada no Curso Internacional de Cerámica de Pontevedra pic.twitter.com/8pWvhb8sjA
— Diario de Pontevedra (@Diario_Pontev) 19 de julio de 2018
Este jueves, cuando Alberto Andrés realizó su intervención a través del teléfono, contó que Carne cruda fue una serie iniciada teniendo como referencia una carnicería delante de la que él jugaba cuando era chaval. "Años después se convirtió en un prostíbulo", explicó. "De esa idea de la venta de la carne como alimento, primero, a su venta para proporcionar placer, después, nació todo este proyecto". El artista también indicó que le gustaría que su pieza acabase integrándose en la vida cotidiana del centro. "Que los estudiantes se sienten en ella, por ejemplo, que la utilicen". Las pandereteiras Solimán le hicieron caso y cerraron el acto sentadas sobre ella.
