El PP reabrió este miércoles el frente de las licencias municipales para criticar al Gobierno local. Su portavoz, Rafa Domínguez, aseguró que hay solicitudes que acumulan hasta tres años de trámites. Y mencionó, sin más concreción, un caso en el polígono industrial de O Campiño.
El líder del principal partido de la oposición llevará este asunto al Pleno municipal para reclamar más personal para el servicio de Urbanismo, sin concretar el número de efectivos necesarios porque "no lo tenemos calculado".
La moción también propondrá que la tramitación de estos permisos los lleve una empresa externa a través de las denominadas entidades certificadoras. Esta vía, reconoció, "tiene un inconveniente": el pago de las correspondientes tasas a la firma que asumiese esta tarea.
Domínguez vinculó el "retraso" en la concesión de las licencias a la falta de renovación del PXOM, que relacionó con el vial de acceso a Mollavao, que está parado porque le falta el visto bueno de Costas; al conflicto laboral y salarial de los funcionarios, al entender que "cuando uno va a trabajar contento mejora su rendimiento"; a que los funcionarios "no tienen las herramientas adecuadas para hacer su trabajo" y a la "desidia de los concejales del BNG y del PSOE", a los que acusa de "no estar encima de los expedientes por falta de capacidad".
El Partido Popular pide más personal para Urbanismo y que una empresa externa asuma la tramitación de las licencias
El jefe de los ‘populares’, que aseguró -también sin datos- que hay empresas que prefieren irse a otros municipios por las demoras en el papeleo en el Concello de Pontevedra, volvió a vestirse el traje electoral y a lanzar una nueva promesa si logra ser alcalde en 2023: que todos los permisos municipales se despecharán en un período máximo de dos meses. Domínguez tiró de crítica y retranca para asegurar que él aplicará la "vía Lores" para que cualquier trámite no tarde más que el del alcalde a la hora de regularizar la situación de su vivienda, que estuvo 22 años sin licencia de primera ocupación.
Miguel Anxo Fernández Lores compareció este miércoles ante la prensa con el edil de Urbanismo, Xaquín Moreda, para replicar al PP. El regidor nacionalista desmintió los plazos ofrecidos por el líder de la oposición tras asegurar que en Pontevedra ninguna solicitud de licencia se demora más de 45 días si los promotores tienen todos los papeles en regla, esto es, si presentan toda la documentación de forma correcta. En este sentido, aseguró que los proyectos de las administraciones públicas se resuelven entre cinco y 15 días y los de la iniciativa privada entre 15 y 45 días.
XUNTA. El alcalde respondió también a las críticas de la Xunta por los permisos de obra para reformar la residencia de mayores de Campolongo y para construir el nuevo geriátrico en A Eiriña. En el primer caso, Lores precisó que la demora se debe a que la instalación, situada en la avenida de María Victoria Moreno, carece de licencia de primera ocupación. Hasta que se resuelva este trámite no podrá continuarse con la solicitud de permiso de obras para rehabilitar el edificio.
La residencia de mayores de Campolongo no tiene licencia de primera ocupación y a la de A Eiriña le falta un papel de Política Social
En el caso de la de A Eiriña, el proyecto que financiará la Fundación Amancio Ortega cuenta ya con todos los informes favorables después de haberse detectado que la documentación entregada no cumplía con todos los requisitos legales. Solo falta que la Consellería de Política Social aporte un último papel para dar vía libre al permiso municipal. En este sentido, Lores lamentó que se cree un "problema" cuando este proyecto lleva tiempo pendiente. En este sentido, recordó que "a culpa non a ten o Concello, que non é o que ten que presentar a documentación correcta", zanjó.
