Los barrios que mejor reciclen su comida pagarán menos impuestos

El Concello estudia la manera de premiar a los vecindarios en los que se implante el sistema de compostaje con una reducción de la tasa de la basura ►La medida podría aplicarse en 2018
Composteros instalados el verano pasado en Monte Porreiro
photo_camera Composteros instalados el verano pasado en Monte Porreiro

Los barrios que mejor reciclen sus restos de comida pagarán menos impuestos. Esta es la idea con la que trabaja el Concello de Pontevedra, que, en colaboración con la Deputación, iniciará este año los estudios económicos pertinentes para adecuar las tarifas de la recogida de basura al nuevo sistema de compostaje, cuya implantación se está realizando a cuentagotas. El portavoz municipal y concejal de Facenda, Raimundo González Carballo, informó este lunes de que el objetivo de esta iniciativa es premiar a los vecindarios en los que se instalen los composteros para convertir los residuos orgánicos en abono natural "con tarifas á baixa". Esto supondría una reducción de la actual tasa de basura.

La aplicación de la medida no será inmediata. De hecho, estará ligada a la implantación del nuevo sistema de reciclaje en los barrios, esto es, hasta que las distintas zonas de la ciudad no dispongan de todos los medios necesarios para participar en él no podrán acceder a estas bonificaciones. La rebaja en la factura dependerá también de otra cuestión: las conclusiones del estudio que lleven a cabo Concello y Deputación, lo que obligará a modificar las ordenanzas fiscales.

Los vecinos de Campolongo y Monte Porreiro serán los primeros en acceder a las bonificaciones por su adhesión al compostaje

En la actualidad, la tasa doméstica de la basura asciende a 131,58 euros al año en el caso de las viviendas. Con las deducciones previstas por el Gobierno local, la factura de una familia se reduciría entre diez y 30 euros anuales.

Esta situación supondría una menor recaudación por parte del Ayuntamiento, que dejaría de ingresar entre 800.000 y 900.000 euros, según las primeras estimaciones del concejal de Facenda. La cifra es importante, pues supone casi el 15% del dinero que entra en las arcas locales a través de los impuestos del servicio de recogida de basura, por el que Pontevedra ingresará 5,95 millones de euros este año.

LOS PIONEROS. Los vecinos de Monte Porreiro y Campolongo serán los primeros en beneficiarse de las deducciones. El Concello instalará en ambos barrios 79 centros de compostaje comunitario para dar servicio a sus más de 8.100 residentes. Se calcula que los dos vecindarios reciclarán el 42% de toda la basura que producen gracias a estas instalaciones.

Además de este sistema, el Ayuntamiento confía en que la puesta en marcha de la planta de compostaje contribuya a reducir el coste del servicio. El complejo que se construirá en A Canicouva tratará la basura orgánica de unos 39.000 pontevedreses, lo que equivale al 46% de la población del municipio, tal y como se detalla en el avance del Plan de Residuos de Pontevedra, elaborado por técnicos de la Deputación.

El edil de Facenda cifra el ahorro en el recibo en hasta 30 euros al año y calcula que las arcas locales dejarán de ingresar unos 900.000 €

El informe también revela que la instalación reciclará un mínimo de 5.700 toneladas anuales de restos de comida. Lo que todavía no está claro es si la planta recibirá otro tipo de basura, como envases. Sobre esta cuestión discuten en la actualidad los técnicos. Su decisión obligaría a introducir cambios en el futuro sistema de recogida de basura en la ciudad, ya que se tendría que decidir si se habilita un contenedor específico para la denominada fracción seca mixta, es decir, para tratar textiles, latas y plásticos.

ENVÍOS A SOGAMA. La construcción de la planta de A Canicouva supondría reducir los envíos de basura a Sogama casi a la mitad. La planta de Cerceda incinera cada año unas 30.000 toneladas de residuos procedentes de Pontevedra. Con el nuevo sistema, el cálculo es dejar de enviar entre 12.000 y 15.000.

La puesta en marcha del nuevo sistema de reciclaje, que aspira a superar las exigencias europeas en esta materia para el año 2020, también introducirá cambios en el actual contrato de las basuras. Ferrovial Servicios (antigua Cespa) es la adjudicataria del servicio, que podría prorrogarse en caso de que no se resuelva el nuevo concurso antes del 30 de junio, fecha en la que finaliza la concesión.

El Plan de Residuos de Pontevedra prevé además el reparto de 87.00 composteros para casas con huerto del rural y 191 centros de compost para los barrios urbanos.

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