Los vecinos de Mourente verán al fin este año atendida su histórica reivindicación de una red de saneamiento. Tras varios años encabezando protestas, forzando reuniones con representantes de distintas formaciones políticas y reventando plenos municipales, el Gobierno capitalino ha decidido impulsar la obra con un presupuesto nada desdeñable de casi un millón de euros (987.982 euros).
El concejal responsable del Ciclo da Auga, Raimundo González, y el edil delegado de la parroquia, Alberto Oubiña, presentaron ayer el proyecto en el Consistorio, donde hicieron saber que el entramado de nuevas tuberías discurrirá entre los quilómetros 88 y 90 de la carretera de Ourense (N-541), esto es, entre la salida de Casas Novas y la entrada de Bora.
La nueva red conducirá las aguas residuales de los lugares de O Pazo, Carabelos, Eirós y Leirados, hasta hacerlas llegar a la planta depuradora de Os Praceres. Las conducciones serán instaladas en ambos márgenes de la carretera y se ramificarán hacia la parte derecha (en sentido Ourense) para dar servicio a las casas situadas en este punto de la parroquia. Así, el Concello prevé dotar de saneamiento a entre 130 y 140 viviendas, en las que se calcula que hay unos 540 habitantes.
El Concello espera poder iniciar este año la obra, que contará con un plazo de ejecución de nueve meses. El próximo paso será la celebración de una asamblea con los vecinos con el ánimo de presentar el proyecto y escuchar posibles sugerencias. La reunión será convocada en los próximos días, según informó Oubiña.
El Concello financiará la obra con fondos municipales para no demorar más la actuación, aunque la intención final es incluirla en el tercer convenio de saneamiento que está pendiente de firmar con la Xunta de Galicia. De hecho, González recordó que existe un acuerdo plenario en este sentido y que, precisamente, será uno de los temas a tratar en la próxima reunión entre el alcalde y el presidente del Ejecutivo gallego. El convenio parece estar atascado y no es pecata minuta la cantidad que está en juego, puesto que la cifra podría rondar los 14 millones. Además, la obra estaba dentro de las medidas que el BNG se comprometió a ejecutar en sus primeros cien días de Gobierno.
La hoja de ruta trazada por el Gobierno capitalino también contempla iniciar los trabajos tan pronto como finalice el proceso administrativo. De entrada, no esperará a que el Ministerio de Fomento comience la obra de mejora de la seguridad vial que prevé llevar a cabo en la carretera de Ourense, entre Pontevedra y Cerdedo, aunque tampoco descarta coordinarse con el departamento estatal: "Se vemos que ao Ministerio lle queda un mes para iniciar os traballos, coordinarémonos co mesmo, pero, se vemos que non é posible, tiraremos para adiante, porque non hai consenso dos vecinos con esta obra do Estado e non queremos que isto se eternice", explicó González.
Ante las primeras informaciones, los vecinos de Mourente y Bora trasladaron la "enhorabuena" al Concello. Solo recordaron una cosa: "que el saneamiento debe ser integral", porque algunas viviendas se abastecen de pozos artesanales, cuyas aguas "están contaminadas". Además, instaron a la Xunta y Fomento a colaborar "en la consecución de los servicios que pide la ciudadanía".
