El mal tiempo eleva las visitas de pacientes al servicio de Urxencias de Montecelo

Pacientes, este jueves, en los pasillos de Urxencias. DP
photo_camera Pacientes, este jueves, en los pasillos de Urxencias. DP

Aunque todavía faltan dos semanas para la entrada oficial del invierno, el servicio de Urxencias de Montecelo lleva varias jornadas registrando un repunte de pacientes que los expertos asocian a las "patologías propias" de la estación invernal, véase gripe, infecciones respiratorias y otros cuadros clínicos que se agudizan con la llegada de las bajas temperaturas.

A las 16.00 horas del jueves se contabilizaban más de 50 personas en las salas de espera del servicio, sin contar los usuarios repartidos en el resto de las instalaciones de Urxencias. La elevada demanda y la falta de espacio dio lugar a que varios enfermeros se vieran abocados a esperar asistencia médica en camillas distribuidas en los pasillos de Urxencias; en una estampa que, lejos de sorprender, se ha ‘normalizado’.

Los trabajadores aseguran que la saturación fue mayor a principios de semana, cuando se registraron colapsos periódicos en el área de Urxencias. Fuentes oficiales confirmaron que el servicio percibió "un aumento de demanda" y que, tal y como dicta el protocolo, el personal sanitario atiende a los pacientes que van llegando a Montecelo "por orden de prioridad".

Los sindicatos atribuyen estos episodios a la falta de personal, a la ausencia de camas y a la priorización de ocupación de camas para peonadas, es decir, para las operaciones quirúrgicas que realiza el personal sanitario por las tardes, habitualmente, como horas extra.

MEDIDAS DE MEJORA. A la espera de la llegada de los picos de la gripe, el Complexo Hospitalario Universitario de Pontevedra (CHOP) ha comenzado a implantar nuevos circuitos en el servicio de Urxencias para mejorar los tiempos de respuesta a los pacientes. La reorganización afecta al sistema de triaje, en el que se valora la gravedad del estado de los pacientes y el orden de la atención.

Además, está adoptando varias medidas para mejorar la asistencia de las emergencias como, por ejemplo, el desarrollo de una aplicación para tener la trazabilidad de los pacientes desde que entran en Urxencias. Uno de los modelos a seguir es el sistema proyectado en 2011 para el Hospital de Lugo, que consiste en colocar una pulsera de radiofrecuencia en los usuarios que entran por Urxencias para que pueda ser leída de forma automática a su paso por cada estancia. ¿Los objetivos? Básicamente dos: acelerar los procesos de asistencia sanitaria e incrementar la seguridad del enfermo.

Comentarios