Mamparas para recuperar la presencialidad total en Bachillerato en el Valle Inclán

La autorización para instalar los elementos separadores por parte de Educación no anula la reunión con Inspección. La ANPA mantiene su apoyo a las movilizaciones convocadas en el IES Sánchez Cantón
Movilización realizada esta semana con familias y estudiantes del Sánchez Cantón y el Valle Inclán. J.CERVERA
photo_camera Movilización realizada esta semana con familias y estudiantes del Sánchez Cantón y el Valle Inclán.

Las movilizaciones de las familias por recuperar la presencialidad total en Bachillerato que el coronavirus robó este curso en los IES Valle Inclán y Sánchez Cantón empiezan a dar sus frutos, a menos en el primero de ellos. La Xefatura Territorial de Educación ha autorizado la instalación de mamparas en las aulas del primero de estos centros. La decisión fue trasladada el pasado viernes a través del correo electrónico a la dirección del IES Valle Inclán, que, a su vez, lo comunicó a la Asociación de Nais e Pais (ANPA) que difundió la noticia entre la comunidad educativa.

De este modo, a lo largo de la próxima semana la dirección del instituto prevé recolocar a todo el alumnado, tanto de la Eso como de Bachillerato, a la espera de que las mamparas queden instaladas y se pueda dar cabida a todo el estudiantado en horario de mañana. Este centro cuenta con 23 grupos en Secundaria y con 260 alumnos en Bachillerato (140 en primero y 120 en segundo).

Aun así, esta "buena noticia2 no frena las actuaciones que la ANPA tenía previstas, sobre todo a la espera de ver que el anuncio se haga realidad. Así, la asociación tiene previsto reunirse el próximo jueves 8 con la Inspección para trasladar sus demandas y también expresó su apoyo a la concentración convocada para el miércoles 7 por las familias afectadas del IES Sánchez Cantón, ya que este centro continúa a la espera de una solución que permita que las clases sean totalmente presenciales, tal como han exigido desde antes de iniciarse el curso en dos movilizaciones en la calle.

Este instituto, además, sufre el agravante de que las clases de Bachillerato son por la tarde. En ambos casos el alumnado de esta etapa educativa está recibiendo únicamente 15 horas de clases semanales, frente a las 32 que les correspondería. A mayores, las familias denuncian que en los momentos del horario lectivo que el estudiantado no se encuentra en el aula tampoco recibe formación telemática, sino que debe dedicarse a "tareas".

Esta situación también se ha colado en la agenda política. Si el viernes era el BNG el que recibía a los afectados, ayer fue el PP el que remitió un comunicado sobre la reunión mantenida por madres y padres del alumnado de ambos centros con el presidente local, Rafa Domínguez, y la edil Pepa Pardo. Ambos les transmitieron que "la prioridad de la Xunta es la educación presencial" y que «se sigue trabajando desde el Gobierno autonómico por la mejor solución para todas las partes implicadas» para poder "mantener la calidad en cualquier situación y en todas las etapas educativas". Sus palabras no evitaron que la movilización del próximo miércoles continúe en pie.