El Mapa del Miedo suma 276 relatos de acosos y agresiones vividas por mujeres

La iniciativa de la pontevedresa Jessyca Ocampo ha traspasado las fronteras gallegas y estatales y ya supera las 258.400 visitas
En la ciudad de Pontevedra, el Mapa del Miedo incluye una veintena de testimonios, marcados con puntos violeta. DP
photo_camera En la ciudad de Pontevedra, el Mapa del Miedo incluye una veintena de testimonios, marcados con puntos violeta. DP

En enero del año pasado, la pontevedresa Jessyca Ocampo puso en marcha el Mapa del Miedo, una herramienta gráfica creada con el objetivo de recoger y geolocalizar los testimonios de mujeres que habían sufrido agresiones sexuales en calles y otros espacios públicos a lo largo y ancho de las cuatro provincias gallegas, a fin de alertar al resto de mujeres y hacer más visible este grave problema. Desde entonces, el mapa suma ya más de 270 relatos de víctimas y supera las 258.400 visitas.

Además, ha conseguido sobrepasar las fronteras gallegas, incluyendo también testimonios de mujeres acosadas o agredidas en otros puntos del Estado (Bilbao, Zaragoza, Salamanca, Madrid, Valencia, Sevilla, Granada, Málaga y varias provincias catalanas) y su repercursión ha sido tal que el Mapa del Miedo se extiende ahora más allá de los límites del Estado español, pues varias víctimas de este tipo de situaciones han aportado las terribles vivencias que han sufrido en varios puntos de Reino Unido y en la ciudad alemana de Düsseldorf.

Y es que esta lacra alcanza cualquier rincón del globo y ni Galicia ni Pontevedra son una excepción. En la capital del Lérez el Mapa del Miedo muestra 21 testimonios, algunos de ellos en lugares tan céntricos como la Praza de España, la Praza da Peregrina, Barcelos, los Xardíns de Vicenti, la calle Palamios, la Biblioteca Pública, la calle Fernando Olmedo, Cobian Roffignac, Fernández Ladreda y otros tantos.

"Vou camiñando para casa despois de saír do traballo e crúzome cun señor duns 60 anos que me mira e, ao pasar ao meu lado achégase ao meu oído e susúrrame: 'guapa'. Míroo á cara e fai un xesto lascivo coa lingua (...)", es el relato de una mujer en la calle Fernando Olmedo.

"O ano pasado en Pontevedra, unha familiar de 35 anos, ao saír de traballar decidiu atallar para chegar ao coche e ir polo paseo que hai por debaixo do hotel Dabarca, ao lado do río. Ela notaba que alguén a seguía e cando se encheu de valor xirouse e, a plena luz do día (19.00 en verán), atopouse a un varón de complexión media, caucásico, tocándose mentras a seguía e cando ela se xirou non se espantou, se non que se quedou quieto e empezou a masturbarse moito máis rápido (...)", es otro testimonio en la calle Palamios.

"No Samaín voltando de festa por Campolongo empezoume a seguir un señor. Ó principio pensei que eran paranoias miñas ata que me empezou a gritar que facía por alí unha moza tan guapa soa pola rúa a esas horas, que si lle ía facer compañía, etcétera. Intentei pasar e non mirei atrás. Simplemente acelerei o paso para chegar máis rápido á casa (...) O tío seguiume ata a entrada de Campolongo, onde me conseguiu agarrar. Empurroume contra un coche e díxome que estivese tranquila que o iamos pasar moi ben. Se non chega a ser por un grupo de mozos que ían a polo coche non sei que me tería pasado (...)", son las palabras de otra mujer.

A los tres casos anteriores se suman otros muchos y, tal y como explica la promotora del Mapa del Miedo, "por desgracia las historias siguen aumentando".

Al menos, "el Mapa ha ayudado en cierto sentido, porque se viralizó mucho y eso ha contribuído a visualizar el gran problema que existe y a partir de ahí se han tomado algunas medidas de precaución y de seguridad. Está valiendo para la reflexión y para ayudar a que nosotras estemos más seguras", añadió.

Con este objetivo, Jessyca Ocampo indica que "seguimos trabajando" en esta herramienta, "pero poco a poco". Además, "ahora hay un grupo de chicas que tienen una organización llamada Violet y que de vez en cuando organiza talleres y actividades en Barcelona" y está promocionando el Mapa del Miedo en Cataluña, "por eso se están incorporando testimonios por allí", precisó.

Puntos violeta y campañas contra la violencia sexual
Instituciones como la Deputación y el Concello de Pontevedra, entre otras, han lanzado una serie de iniciativas encaminadas a prevenir agresiones sexuales y luchar contra la violencia machista. Las campañas Lembra! Eu decido, ti respectas y Conta comigo, eu respéctote son dos ejemplos. La institución provincial las está desarrollando un año más en los Rías Baixas Fest y ambas han llegado ya a miles de personas.

Van dirigidas tanto a chicos como a chicas, "con materiais nos que se ofrece unha actuación integral de prevención e actuación contra os devanditos tipos de agresión sexual e nos que se amosan con claridade os límites nas relacións entre adolescentes, facendo fincapé en que estas agresións son un delito e que a culpa nunca é da vítima", señala la Deputación.

El Concello también ha apostado por ese objetivo con la campaña Sen o meu si, non y con un Punto Morado que funcionará durante las fiestas de A Peregrina para que las mujeres que se sientan acosadas o sufran agresiones machistas tengan un lugar de referencia para pedir ayuda.

Comentarios