El mar ha segado la vida de 23 personas durante el siglo XXI en aguas pontevedresas

las durísimas condiciones a las que se enfrentan cada día los marineros provocan que, en ocasiones, se produzcan desgracias con fatales consecuencias. Este es un compendio de las más dramáticas

Solo quien se ha enfrentado a olas de seis metros en medio de una tempestad o quien ha recogido aparejo en una cubierta zarandeada por el mar embravecido alcanza a saber cuan extrema es la vida de quienes se ganan la vida a bordo de un pesquero. Un riesgo que, en ocasiones, se traduce en tragedias como la que este miércoles sacudió la comarca de O Salnés, que vio cómo cuatro de sus convecinos eran engullidos por el océano. Se ha recuperado el cuerpo de tres y continúa desaparecido un cuarto.

La crónica negra de los naufragios registrados en lo que va de siglo XXI eleva a 23 los fallecidos en aguas próximas a la provincia de Pontevedra, producto de un total de 11 accidentes. Su cronología es la siguiente:

24 de noviembre de 2000

Buraz

Dos marineros muertos y otros dos desaparecidos al hundirse el pesquero Buraz, entre la isla de Ons y la de Sálvora. Siete años después, la Justicia condenó al armador (que perdió un hijo en la tragedia) por realizar reformas ilegales en el barco.

3 de marzo de 2010

Tres marineros muertos, todos ellos portugueses, al partirse en dos el pesquero Vimar, de bandera lusa, como consecuencia de un golpe de mar sufrido por la embarcación a la altura de A Ínsua, en la desembocadura del río Miño, frente a A Guarda. Otros dos marineros sobrevivieron.

7 de junio de 2010

Aparece en una cueva de la isla de Ons el cadáver de un joven natural de Moaña y vecino del islote, que tres días antes había salido por la tarde a navegar en una jornada de mucho mar de fondo.

23 de diciembre de 2011

El barco del práctico de Vilagarcía se va a pique tras colisionar contra un mercante portacontenedores de compañía Boluda en el mismo puerto. Falleció un tripulante y dos resultaron heridos.

15 de marzo de 2012

Dos vecinos de Bueu habían salido a pescar lubinas en una lancha deportiva. No regresaron con vida. Un golpe de mar volcó su embarcación, de nombre Ricky.

9 de febrero de 2013

Nueva tragedia en las aguas de la ría pontevedra. Un vecino de Vilagarcía de 79 años fue rescatado del agua por la Guardia Civil, sin vida con el chaleco puesto. Había salido por la mañana de su casa en una embarcación de recreo para ir a pescar solo.

29 de enero de 2016

La embarcación Látigo, con dos marineros a bordo, desapareció en la zona del islote de Agoeiro, al sur de las Islas Cíes, cuando faenaba en busca de lubina. Ambos pertenecían a la cofradía de Vigo.

6 de mayo de 2016

Un año negro, pues en apenas cuatro meses se registraron dos trágicos naufragios, segando la vida de tres personas. Este segundo accidente se produjo cuando la embarcación Rebeca volcó por un golpe de mar en la zona de Cabo Home, lanzando al agua a sus dos ocupantes. El patrón falleció y su compañero pudo llegar a nado hasta la orilla, pese a tener un fuerte golpe en la cabeza. Fue auxiliado y trasladado al centro de salud de Cangas.

26 de abril de 2017

Nuevo Marcos

El último episodio luctuoso antes del ocurrido este miércoles tuvo como escenario las inmediaciones de la Illa de Tambo. El Nuevo Marcos, un pesquero de doce metros de eslora, enfilaba hacia el muelle de Combarro cuando colisionó violentamente contra una de las bateas, desencadenándose la tragedia: tres de los cincos tripulantes perdieron la vida, mientras que los dos hijos de dos de los fallecidos lograron salvarse. Uno de ellos fue rescatado agarrado a una batea, muy cerca de donde se encontraba el cuerpo de su progenitor; el otro consiguió llegar hasta la playa de As Canteiras y pedir ayuda, en una gesto de supervivencia que muchos consideran una hazaña, pues estuvo nadando durante casi dos horas.

La mayor tragedia. Mar de Marín: cuatro muertos y un desaparecido

Mar de Marín

Los avances tecnológicos han permitido un control absoluto sobre la situación de los grandes barcos, lo que ha dejado las otro habituales colisiones en alta mar como algo residual. Sin embargo, los sistemas no son infalibles y menos cuando por medio se cruza el error humano.

Fue lo que ocurrió el 1 de abril de 2014, cuando el pesquero Mar de Marín invadió la vía por la que navegaba en sentido contrario el gigantesco mercante malayo Baltic Breeze, de 164 metros de eslora, que literalmente se lo llevó por delante. El arrastrero tardó apenas tres minutos en irse al fondo de la ría de Vigo: Se rescataron cuatro cadáveres y un quinto sigue desaparecido.