El marisqueo a pie volvió a la faena. Las dos últimas analíticas realizadas por el Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño de Galicia (Intecmar) arrojaron un resultado positivo, lo que motivó que se levantase el cierre por toxina que se había decretado el pasado 28 de abril.
Se trata del tercer cierre en menos de 15 días para el sector por episodios de lipofílicas. A diferencia de los dos primeros registrados, que se llevaron a cabo de manera cautelar, el de finales de abril fue cierre definitivo por niveles altos de toxinas detectados en el agua.
Durante la mañana de este viernes, los trabajadores de las tres cofradías del fondo de la ría de Pontevedra estuvieron mariscando en la zona de Combarro y en Os Praceres y, tal y como manifestó el patrón mayor de la Cofradía de San Telmo, Iago Tomé, "a xornada foi moi boa".
El parón afectó a 438 personas que trabajan en la extracción de bivalvos en las playas del fondo de la ría pontevedresa
Por su parte, la patrona de la Cofradía de Lourizán, Carmen Vázquez Nores, destacó "la estabilidad de los precios" en la vuelta al marisqueo. "Esperemos que la semana que viene podamos seguir igual trabajando".
Los precios que se alcanzaron estuvieron en la línea de las veces anteriores, señalaron desde las cofradías. Así, la almeja japónica se vendió a partir de 11,31 euros el kilo, y la extra a 14,50 euros el kilo.
El parón afectó a 438 personas que, según el plan de explotación del sector, trabajan en la extracción de bivalvos en las playas del fondo de la ría pontevedresa de la mano de las cofradías de Raxó, San Telmo y Lourizán. Como la subasta se puede realizar de forma online permite margen de maniobra a los compradores, que ya no tienen que desplazarse a la lonja.
