Las críticas de los comerciantes, y también de la oposición, con respecto al mal funcionamiento del servicio de recogida de basura han hecho reaccionar al Concello. La portavoz municipal, Anabel Gulías, aseguró este lunes la puesta en marcha de una campaña de "intensificación" de la recogida de cartón y vidrio puerta a puerta en bares y comercios. El objetivo es evitar la mala imagen que este verano dieron algunas zonas del casco histórico, con contenedores a rebosar.
Los déficits del servicio fueron denunciados este verano por el Centro Comercial Urbano Zona Monumental, que recibió quejas por la acumulación de basura y por la precariedad de algunos contenedores, que estaban rotos. Las críticas no tardaron en llegar por parte del PP, que reclamó una "intervención" en la concesión, que gestiona la empresa Ferrovial Servicios (la antigua Cespa) desde 1999.
En el primer semestre de 2020 se licitará la limpieza de las sede municipales. Lagares Oca hará los pliegos del nuevo contrato de la basura
El contrato, que fue firmado por el último alcalde popular, Juan Luis Pedrosa, está "obsoleto". Y así lo reconoce el Gobierno local, que ha iniciado ya los trámites para su renovación.
La consultora viguesa Lagares Oca se ocupa de la definición del nuevo sistema de basuras y cómo este afectará a los vecinos en función de la zona en la que residan (en el centro o en el rural) y del tipo de vivienda (con o sin huerto). Su tarea no solo incluye la elaboracíon de los pliegos para licitar el nuevo contrato, sino que también se ocupará de analizar las ofertas de las empresas que se presenten al concurso público. Por ambas cobrará 66.550 euros.
La nueva concesión de las basuras deberá incluir los siguientes servicios: recogida de residuos, limpieza viaria, campañas de desinfección y desratización y limpieza de colegios públicos y dependencias municipales. Su licitación no podrá hacerse en varios lotes, como obliga la Ley de Contratos. De hecho, el primer servicio que saldrá a contratación es la limpieza de los edificios utilizados por el Concello. Gulías asegura que este proceso saldrá adelante en el primer semestre de 2020.
"Esperemos que este contrato nos dea tantas alegrías como o da auga. E que en dous anos teñamos un contrato de lixo á altura desta cidade", afirmó la portavoz municipal.
COMPOST. El diseño del nuevo plan de basuras hará despegar el compostaje, el sistema que obligará a reciclar los restos de comida a través de varias fórmulas: el comunitario (con composteros para dar servicio a los barrios), el individual (para las casas del rural con huerto) y el que se tratará en la futura planta de compost de A Canicouva, cuyo proyecto acumula años de retrasos.
El Concello se ha dado hasta el 9 de junio de 2021 para poner en marcha este nuevo contrato. De hecho, a partir de esa fecha caducará la prórroga firmada con Ferrovial Servicios. El servicio de basura de Pontevedra cuenta en la actualidad con 125 empleados y cuesta casi 5,9 millones de euros al año. El coste será mayor, pero el recibo no subirá.