¿Qué es el triángulo de Sierpinski? Esta figura geométrica, que toma el nombre del matemático polaco que la describió por primera vez en 2016, sirvió para que un grupo de alumnos de Secundaria del colegio Sagrado Corazón de Placeres llevara las matemáticas a la calle. La Praza de Ourense se llenó en la tarde de este viernes de curiosos que quisieron saber qué era aquella construcción de cuatro metros de alto elaborada con más de 3.000 latas de refresco.
Gaspar Antelo, director del departamento de Matemáticas del centro, explica que esta cosa es un fractal. "Tiene ocho metros de lado. Primero lo montamos en el suelo y después lo ponemos como una pirámide". La figura se monta a niveles de distintos tamaños, siempre en forma de triángulo equilátero.
Además de aprender la asignatura con un método más entrenido, la actividad también sirvió para fomentar el reciclaje y convertir una estructura matemática "en una obra de arte". El objetivo era dar al alumnado "una visión distinta" de la materia. "Después en clase calcularemos las dimensiones, la altura y el volumen, las potencias...".
No es la primera vez que los de Lourizán llaman la atención en el centro de la ciudad. "Una vez estuvimos montando las cúpulas de Leonardo da Vinci y ahora se nos ocurrió este proyecto".
"Intentamos traer las matemáticas a la calle", señala Antelo, mientras los estudiantes trabajan en el montaje y los viandantes preguntan qué es todo aquello. Por eso completaron la muestra con carteles explicativos. "Partimos de un triángulo pequeñito formado por tres latas. La construcción más grande que tenemos aquí es de ocho metros, porque la siguiente sería de 16".
LIGAMATS. Entre todas las estructuras "hay cerca de 3.000 latas", lo que supuso meses de trabajo para toda la comunidad educativa. "Aprovechamos para hacer una campaña de reciclaje y fijamos unos días para que vinieran al colegio a montarlos".
Así, elaboraron unos moldes de madera de diferentes tamaños para ir creando los triángulos. "Hicimos una cadena de montaje y, de paso, les explicamos como funciona una fábrica". Lo hicieron todo, excepto las estructuras principales, de metal.
Aunque este viernes acudieron menos, en el colegio se implicaron unos 250 estudiantes de entre 6º de Primaria y 4º de ESO. "Los chavales están encantados. Son matemáticas, pero más divertidas".
Esta actividad coincide con la reciente victoria del centro en las tres categorías del concurso interescolar Ligamats, en lo que fue la primera vez en los 15 años de historia del certamen que un solo centro se lleva todos los premios. "Esto fue coincidencia, pero no es casualidad el camino que llevamos en el cole con las Matemáticas, de explicarlas de otra manera y trabajarlas de otra forma. También hicimos otro fractal, una esponja de Menger con 160.000 cubos de papel, que está en el Museo das Palabras de Vigo", en ese caso en colaboración con otros centros.
