Alejandro Iglesias Rodríguez, padre de Sonia Iglesias, falleció el pasado jueves a los 73 años y fue enterrado en la iglesia parroquial de San Martín de Verducido.
Su vida y la de su mujer, Carmen Eirín, cambió para siempre cuando en agosto de 2010 desapareció en Pontevedra su hija, de la que nada se volvió a saber. El caso sigue abierto, aunque el principal sospechoso, Julio Araújo, falleció el pasado mes de septiembre.
Cuatro años después de la desaparición de Sonia, su hermana Maricarmen hablaba así de sus padres: "Tienen 60 años y parece que tienen 80. Están hechos polvo, ellos sí que ya no levantarán cabeza nunca más".