Nexia solicita el preconcurso para rehuir "el bloqueo de bancos y proveedores"

El administrador alega que pretende evitar los posibles embargos ►Dos inspectores de la Seguridad Social interrogan a los trabajadores, "de brazos cruzados" por la falta de material
Trabajadores, este martes, en la planta de aglomerado de Nexia, situada en Marcón. GONZALO GARCÍA
photo_camera Trabajadores, este martes, en la planta de aglomerado de Nexia, situada en Marcón. GONZALO GARCÍA

El final que atisbaban muchos al principio del conflicto se ha materializado. Nexia ha solicitado el preconcurso de acreedores en el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Pontevedra y, según advierte la propia empresa, ya "ha sido aceptado".

La medida fue confirmada este martes por el nuevo administrador de la empresa, José Luis Martínez Rodríguez, apenas 24 horas después de haber afirmado en una entrevista concedida a este periódico que el concurso de acreedores era una opción que "no está encima de la mesa".

El empresario alega que la solicitud fue presentada el pasado viernes para intentar levantar el "bloqueo de bancos y proveedores", que han cerrado el grifo a la constructora por las deudas acumuladas. El alcance de los números rojos sigue siendo una incógnita, si bien los acreedores calculan que las facturas pendientes rondan los 8,5 millones de euros. "El preconcurso es una herramienta que nos permite negociar y presentar un plan de viabilidad porque, si nos entra un embargo, no podemos hacer nada. La idea sigue siendo la misma, trabajar para poder sacar adelante la empresa", indicó Martínez a preguntas de este medio.

DIFERENCIAS. El preconcurso arroja algunas (importantes) ventajas respecto al concurso de acreedores. Una de ellas es que facilita a las empresas un período de hasta cuatro meses para negociar la deuda con los acreedores y entidades bancarias, un plazo mucho más corto que el de un concurso, que puede dilatarse durante varios años. Por otro lado, la compañía evita que entre en juego la figura del administrador concursal, ya que puede mantener sus órganos de gobierno, y durante todo el proceso ni bancos, ni proveedores ni instituciones pueden forzar un proceso concursal contra la firma (lo que se conoce como concurso necesario) o ejecutar embargos contra sus bienes.

Además, el preconcurso cuenta con la ventaja de que, en un principio, no tiene por qué hacerse público, por lo que las empresas pueden afrontar el proceso con más discreción.

Martínez insiste en que la prioridad es elaborar un plan de viabilidad, aunque también reitera que si éste "no es viable porque los acreedores no están de acuerdo, habrá que buscar otra solución".

INSPECCIÓN. La medida trascendió casi al mismo tiempo que se producía este martes una visita "sorpresa" de dos inspectores de la Seguridad Social a las instalaciones de Nexia para examinar la situación de la plantilla, integrada por más de 60 trabajadores. Según las fuentes consultadas, los funcionarios se toparon con todos los empleados "de brazos cruzados", condicionados por la falta de material (que les impide ejecutar obras) y un contrato todavía en vigor que no les permite ausentarse de su puesto de trabajo.

Hasta hace unos días había asalariados repartidos entre algunas de las obras paralizadas, pero la falta de resguardo frente a la lluvia desembocó en la decisión de concentrarse en la planta de aglomerado de A Ermida (Marcón), donde se encuentra la sede social. "Estábamos metidos en los coches las ocho horas de la jornada. No tenía sentido", indica uno de los afectados. Los funcionarios de la Seguridad Social interrogaron a todas las personas que se encontraban en ese momento en las instalaciones, pudiendo constatar que "la única obra en activo está localizada en Carril", donde Nexia sí tiene medios para actuar por ser "subcontrata" y no adjudicataria. El resto están paradas y varias en proceso de rescisión de contrato.

Al parecer, las pesquisas de los inspectores tuvieron lugar a raíz de la reunión que celebraron el pasado martes representantes sindicales con Inspección del Trabajo y un portavoz de la empresa. Las fuentes consultadas aseguran que la previsión del órgano laboral era la de ejecutar medidas "inmediatas" para liberar a los empleados, pero que esta decisión fue pospuesta a raíz de un supuesto mensaje de "alguien de la empresa que les dijo que había trabajo para seguir adelante".

"Ir al puesto de trabajo nos supone un gasto de 15 euros"
Según las fuentes consultadas, los inspectores de la Seguridad Social trasladaron a los trabajadores que harán un informe con los datos recopilados y que en el plazo de "dos o tres días" propondrán una solución. Los afectados esperan que la vía de salida pase por la rescisión de los contratos para poder recurrir al paro, trabajar en otras compañías y reclamar las deudas pendientes al Fondo de Garantía Salarial, Fogasa.

Nexia les adeuda la extra de diciembre y la nómina de enero, además de las "cuotas correspondientes a la Seguridad Social". "Ahora mismo ir al puesto de trabajo nos supone llevar nuestros coches, comer allí o llevar la comida. Cada día nos supone más de 15 euros de gastos y ya estamos a mediados de febrero", concluye uno de los trabajadores.

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