El nonagenario que atropelló a un pelotón ciclista entre A Guarda y Oia no acude al juicio

No por esperado dejó de ser noticia. Manuel Benito A.L., el varón de 91 años acusado de dos homicidios por imprudencia y varios delitos de lesiones graves no compareció este lunes al juicio para el que había sido citado en A Parda. Su letrado, Carlos Borrás, informó de que el domingo por la tarde, horas antes del inicio de la vista oral, su cliente ingresó en un centro hospitalario (por motivos que no precisó), lo que provocó, dada la entidad de los hechos que se le atribuyen, la inmediata suspensión del juicio para una nueva fecha: el 19 de diciembre, a las 10.00 horas, en la misma sede judicial de la Boa Vila.

Víctimas, familiares y testigos sí acudieron a los juzgados de A Parda. GONZALO GARCÍA
 

Quienes sí acudieron a Pontevedra fueron los testigos (hasta 17), las víctimas que sobrevivieron al brutal atropello (que acabó con la vida de dos ciclistas en la carretera que une Vigo con A Guarda, a su paso por Oia) y sus familiares, que deberán volver en el plazo de un mes a los juzgados de A Parda. Algunos tuvieron más suerte, pues las partes en litigio renunciaron a siete de los testimonios, que se unen a algunos de los perjudicados, que ya fueron indemnizados por las compañías aseguradoras y renunciaron a continuar con la acción penal.

Borrás no garantizó la presencia de su cliente en la nueva fecha, pero sí señaló que "este proceso judicial está siendo muy duro para él". Sí explicó que las responsabilidades civiles, de cuantías en algún caso millonarias, "han quedado resueltas casi en un 90 por cien", dado que la mayoría de los ciclistas lesionados y las familias de los fallecidos ya han recibido sus indemnizaciones.

La Fiscalía pide para el acusado la pena máxima por este tipo de delitos, cuatro años de prisión, y una de las acusaciones mantiene la solicitud de condena por una presunta omisión del deber de socorro que el juez instructor no estimó en su momento.

Los informes posteriores al brutal atropello señalan que el acusado se llevó por delante a diez de los 14 ciclistas que componían el pelotón el 12 de marzo de 2016 y que no varió su trayectoria desde el primer hasta el último impacto, retrasando su frenada hasta 200 metros después del siniestro. La embestida del turismo del nonagenario causó la muerte a dos de los ciclistas.