La llegada, en la mañana de este miércoles, a Pontevedra de la tuneladora procedente de Alemania permite seguir avanzando en los trabajos y entrar en una nueva fase de las obras en ejecución del nuevo emisario submarino de Os Praceres. Pero no empezará a excavar de forma inmediata, como cabía pensar, sino que los próximos días todavía se dedicarán al montaje de las piezas de la gigantesca maquinaria y a la realización de diferentes pruebas y autorizaciones. Está previsto que los trabajos, propiamente dichos, no comiencen hasta principios de abril.
La Xunta, que inició en junio del pasado año las obras de este emisario, con una inversión de 12 millones de euros y de manera compatible con la actividad extractiva, sigue avanzando a buen ritmo los trabajos, manteniendo el objetivo de finalizar las obras a finales de este año 2022.
Las actuaciones que se están llevando a cabo se dividen en dos partes: la obra terrestre, que se corresponde con la ejecución de la cámara de carga y estación de bombeo, y del emisario, de más de 3,5 km de longitud.
Para seguir avanzando en la ejecución de las obras es preciso la utilización de la tuneladora llegada este miércoles. Además, se empleará la tecnología innovadora direct pipe, que combina las ventajas del microtúnel con las de la perforación dirigida, siendo un sistema pionero en España.
En este momento está finalizada ya la parte de la obra de ejecución del pozo de ataque para la tuneladora y la excavación del pozo. Además, están realizados los trabajos topográficos que marcan de manera precisa el recorrido y las coordenadas exactas por donde trabajará la tuneladora llegada desde Alemania.
La perforación del túnel del tramo terrestre del emisario se realizará con esta tuneladora, que comenzará a excavar desde ese pozo y terminará saliendo por el fondo marino en el punto donde se iniciará el tramo submarino de la tubería.
EL NUEVO EMISARIO. La construcción del nuevo emisario submarino tiene como objetivo separar los vertidos industriales y los residuales y que cuente con las dimensiones idóneas a las necesidades actuales y futuras; siendo diseñado para dar servicio a una población aproximada de 141.204 habitantes para el año horizonte 2042.
El proyecto incorporó varias modificaciones con el fin de dar solución a las cuestiones sugeridas en el proceso de información pública, lo que supuso un incremento de unos 2 millones de euros sobre el presupuesto inicial.
En este sentido, se modificó la localización de la cámara de carga y de la estación de bombeo a fin de reducir su impacto visual, dejando libre la fachada litoral. También se incrementó la longitud del tramo inicial en el túnel del emisario de cara a no afectar a los bancos marisqueros a pie de Os Praceres, sin que esta medida implique un incremento del volumen de excavación.
El nuevo emisario estará preparado para actuar y tratar las aguas residuales en caso de fallo de la estación depuradora de aguas residuales, estando ya funcionando en fase de pruebas los nuevos sistemas de tratamiento en el marco del contrato de las obras de mejora ejecutadas por la Xunta, tras una inversión autonómica de 16,5 millones de euros.
Esta reforma tecnológica ejecutada en la depuradora pontevedresa permitirá mejorar a corto plazo la limpieza de las aguas residuales de los ayuntamientos de Marín, Poio y Pontevedra, y dar cumplimiento a los límites de vertido marcados por la directiva europea.
Tanto la mejora de la depuradora como la construcción del nuevo emisario submarino forman parte del Plan de saneamiento local elaborado por la Xunta tras un exhaustivo análisis del actual sistema, que fue dialogado con los concellos y con los mariscadores de la ría y que prevé una inversión total de la Administración autonómica de cerca de 47 millones de euros.
Las intervenciones en materia de saneamiento de la ría de Pontevedra están financiadas con fondos europeos del programa operativo Feder Galicia 2014-2020.
