Nuevo fraude en las plazas para personas con movilidad reducida

Denunciado un conductor que utilizaba la tarjeta de su hermana para aparcar en las plazas reservadas cada vez que no encontraba sitio
Una plaza reservada para personas con movilidad reducida
photo_camera Una plaza reservada para personas con movilidad reducida

La Policía Local encontró un nuevo caso de uso fraudulento de las tarjetas que permiten utilizar los aparcamientos reservados a personas con movilidad reducida. Se trata del segundo hombre identificado por esta infracción en menos de una semana.

En esta ocasión se trata de un individuo de 36 años que se desplazaba hasta su trabajo diariamente en coche. Según el informe policial, cuando localizaba un lugar para aparcar en la avenida Xoán Carlos I estacionaba correctamente. Pero si no aparecía ningún hueco en la mencionada calle se dirigía por sistema a una plaza reservada para discapacitados en Maruxa Mallo, aprovechando para ello una tarjeta acreditativa que poseía y que estaba a nombre de su hermana.

Los agentes lo acusan de realizar un uso fraudulento de la tarjeta, tras varios días de seguimiento para comprobar que su actuación se repetía en el tiempo y no se trataba de ninguna acción esporádica.

Los funcionarios comprobaron que cuando salía de su domicilio, y estacionaba cerca del trabajo, o cuando salía del estacionamiento, normalmente en dirección a su casa, no transportaba ningún pasajero con discapacidad, por lo que procedieron a su identificación el pasado lunes, pasadas las tres de la tarde, para formular contra él la correspondiente denuncia administrativa, además de intervenirle la tarjeta.

Al ser preguntado por su comportamiento, declaró que no estaba al tanto de la normativa en vigor y que no había sido informado por los emisores de la tarjeta, reconociendo, además, que su hermana no tiene carné de conducir.

Es el segundo fraude detectado en pocos días, después de que los agentes también hubiesen descubierto la picaresca de un conductor que fingía una cojera para aparcar en las plazas reservadas a personas con algún tipo de discapacidad.

168 DENUNCIAS. La Policía Local tramitó en el año 2016 un total de 168 denuncias por estacionamiento indebido en las plazas reservadas a las personas con movilidad reducida. Se trata de una cifra sensiblemente inferior a la registrada un año antes, cuando se formalizaron 210 denuncias por el mismo motivo, y muy por debajo de las 399 multas impuestas en 2011.

La Jefatura del Cuerpo municipal realiza un seguimiento continuo de estas tarjetas para comprobar que se utilizan de manera correcta y recuerda que su utilización fraudulenta «es una práctica ilegal que atenta contra un modelo urbano que tiene en la accesibilidad universal y la inclusión dos de sus ejes fundamentales».