La NASA encara la recta final para su nueva misión a Marte. Y lo hace en plena pandemia del coronavirus, que ha obligado a la agencia espacial estadounidense a adaptarse al teletrabajo para garantizar el lanzamiento del Perseverance (Perseverancia en español), el nombre que recibe el vehículo de exploración que este verano iniciará su viaje al planeta rojo.
El madrileño Fernando Abilleira, que tiene raíces en Pontevedra (su padre era natural de Xeve), es el director de Diseño de Misión y Navegación y subdirector de Operaciones de Vuelo de un proyecto que tiene como objetivo buscar indicios de vida en suelo marciano. "La mayor parte del ensamblaje y de las pruebas del sistema de vuelo ya se han completado. En las próximas semanas se preparará el vehículo para su configuración de lanzamiento", explica a este periódico desde su casa en Estados Unidos.
El período de lanzamiento del astromóvil irá del 17 de julio al 5 de agosto y su aterrizaje está previsto para el 18 de febrero de 2021. "El equipo lleva trabajando muchos años para asegurar el éxito del mismo. Más que presión, el sentimiento es de ilusión por comenzar este nuevo viaje a Marte", asegura sobre este proyecto millonario, que la NASA considera de "alta prioridad". En él no solo participa la agencia espacial, sino también la industria privada y países como España, que es responsable de la estación meteorológica (conocida como MEDA) que llevará el rover Perseverance a través del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial.
"Me encantaría regresar y compartir con todos los pontevedreses el gran éxito de la misión Perseverance. Adoro Galicia", dice Abilleira
Como en su día ocurrió con el Curiosity y el Insight, las dos fases más críticas de la nueva misión a Marte son las del lanzamiento y el aterrizaje. "Pero esta última es más compleja", indica Abilleira, que explica que el "vehículo tiene que decelerar de una velocidad cercana a los 20.000 kilómetros por hora a menos de tres kilómetros por hora de forma totalmente autónoma a través de un paracaídas supersónico y retrocohetes". "Cualquier pequeño fallo en el sistema de aterrizaje podría resultar catastrófico. No hay margen de error", destaca.
El vehículo de exploración espacial se posará en el cráter Jezero porque los científicos sostienen que es una zona que podría haber albergado vida microscópica. De hecho, se cree que allí pudo haber agua, un extremo que aún no se ha confirmado. El Perseverance, cuyo nombre fue seleccionado a través de un concurso realizado en Estados Unidos y que ganó un niño de 13 años del estado de Virginia, permanecerá en el planeta durante un año marciano, lo que equivale a dos años terrestres. "Durante este tiempo esperamos recoger datos que nos aporten indicios sobre la posible existencia de vida microbiana pasada", añade.
A principios del 2004 empezó a trabajar en el NASA Jet Propulsion Laboratory, situado California, como analista de trayectoria e ingeniero de diseño de misión para la Oficina del Programa de Exploración de Marte.
En 2007 entró a formar parte del equipo que logró aterrizar con éxito el explorador robot Curiosity en Marte el 6 de agosto del 2012. A finales de 2012, entró en el proyecto del Insight, que aterrizó en Marte el 26 de noviembre de 2018, como director de Diseño de Misión y Navegación.
Ahora forma parte de la nueva misión de la Nasa al planeta rojo: la Perseverance.
REIVINDICAR LA CIENCIA. Este ingeniero de 43 años lleva casi media vida trabajando para la NASA. Su experiencia en la agencia espacial comenzó hace ya 19 años. Los últimos 16 los ha desarrollado en el Laboratorio de Propulsión a Reacción que esta administración tiene en California, desde donde reivindica la contribución de la industria aeroespacial al "día a día". "Desde los 60, las tecnologías de la NASA se han convertido en servicios y productos comerciales que benefician a la humanidad. Desde la leche de fórmula para bebés hasta los ratones de ordenadores, por poner dos ejemplos", detalla.
Abilleira también quiere volver a Pontevedra. En 2014 llenó el Teatro Principal con una conferencia sobre la primera misión a Marte, la del Curiosity, y en 2018 repitió visita oficial al Concello. "Me encantaría regresar y compartir con todos los pontevedreses el gran éxito de la misión Perseverance. Adoro Galicia", subraya.