Los desprendimientos en la balconada de una de las dos viviendas abandonadas en el puente de O Burgo han obligado al Concello a ordenar obras de emergencia a la propiedad. El concejal de Urbanismo, Xaquín Moreda, confirmó este martes la orden de ejecución municipal, que tiene como objetivo garantizar la seguridad de los viandantes.
La casa en cuestión, que tiene unos característicos azulejos, está ubicada justo enfrente de la gasolinera de Repsol y su fachada está orientada hacia la zona de estancia creada en el lugar, que se reformó con motivo de la peatonalización del viaducto medieval. Los balcones frontales y laterales, de metal, fueron desmontados pieza por pieza para evitar riesgos.
Este no es el primer percance que afecta a la seguridad vial en la zona. En verano de 2013, una de las edificaciones (la más próxima a la avenida de Domingo Fontán) fue apuntalada por riesgo de desprendimiento. Patrimonio recomendó en su día al Concello que protegiese ambas casas por su valor "histórico y artístico".
