Los actos religiosos en honor a la Virgen Peregrina dieron ayer el pistoletazo de salida con la tradicional ofrenda floral. La encargada de hacerlo fue la presidenta provincial de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), María José Crespo, que puso el foco en las personas que atraviesan por esta enfermedad y en sus familias, a las que este colectivo presta especial atención. En su intervención también lanzó un mensaje a las autoridades, a las que reclamó más medios para luchar contra el cáncer.
Crespo recogió el testigo del presidente de la Asociación de Amigos do Camiño Portugués, Celestino Lores, que el año pasado fue el encargado de dicha exaltación a la patrona de la provincia. El acto religioso tuvo lugar después de que la centenaria carroza, tirada por doce niños y niñas, realizase el tradicional desfile entre la Praza de España y el santuario de A Peregrina.
La carroza fue objeto este año de algunas reparaciones. Entre ellas destaca el cambio de las ruedas y de la estructura de madera, que estaban afectadas por las polillas y la carcoma. El vehículo luce un renovado aspecto, donde predomina el color blanco sobre el dorado y el azul. El tapizado también fue objeto de una mejora valorada en 20.000 euros.
La centenaria carroza no eclipsó otra de las obras de reforma realizadas para la Semana Grande de Pontevedra, la que afectó al retablo mayor del santuario de A Peregrina. Los fieles, tanto vecinos como turistas, comprobaron el buen aspecto que presenta el conjunto patrimonial. La ofrenda floral remató con la multitudinaria colocación de ramos y la suelta de palomas en el exterior de la iglesia.
