Las ONG ofrecen a los refugiados asesoría jurídica, vivienda y ayuda psicológica

Colectivos como Boa Vida explican qué es lo primero que necesitan las personas que llegan huyendo de sus países
Ucranianos que abandonan su país en busca de un lugar más seguro. MARTIN DIVISEK (EFE)
photo_camera Ucranianos que abandonan su país en busca de un lugar más seguro. MARTIN DIVISEK (EFE)
Cuando un refugiado llega a la asociación Boa Vida lo primero que necesita es asesoría jurídica, ayuda psicológica y una vivienda. Lo cuenta Gema Vilas, responsable de Migraciones del colectivo de asistencia social, por el que han pasado numerosas personas que llegan huyendo de sus países de origen.

"Lo primero que hacemos es explicarles qué hace la asociación y cómo podemos ayudarles", cuenta. Normalmente proceden ya de centros de acogida a los que el Estado, que tiene las competencias en materia de migraciones, ha derivado. Muchos de ellos la primera barrera que tienen que vencer es el idioma. "Les ofrecemos asesoría jurídica, ya que en muchos casos es necesario que soliciten protección internacional", explica.

Así, en Boa Vida, les ponen en contacto con la abogada de la asociación que estudia la mejor opción en cada caso. "Cada persona tiene un problema completamente distinto. Nos llegan personas que han tenido que abandonar su residencia por razones políticas, a veces por una guerra, o por un problema social o racial. Por ejemplo, en países donde la homosexualidad está penalizada", sostiene Vilas, que además es psicóloga de Boa Vida. "Generalmente, aquí no ves un conflicto bélico, pero sí social muy importante".

Quienes llaman a la puerta de la asociación lo hacen en busca de ayuda para regularizar su situación y buscar un lugar donde establecerse. "Te cuentan historias muy tristes. Unos llegan en avión, otros después de recorrer media Europa. A veces vienen con familiares y otras están solos...".

Entonces, el equipo de este colectivo solidario se pone en marcha. Trabajadores sociales, mediadores, abogados y psicólogos atienden las distintas necesidades de cada uno. También Boa Vida realiza tareas de acompañamiento a las distintas instituciones para solucionar los trámites. "Ir a la Policía les asusta porque muchas veces en sus países de origen la Policía no ayuda al ciudadano. Nosotros los acompañamos en algunos trámites como en Extranjería", indica Gema Vilas.

VIVIENDA. Una vez solucionan los trámites burocráticos, tras el estudio de cada situación, llega el momento de buscar vivienda para que puedan dejar los centros de acogida. "En Pontevedra el problema de la vivienda es gordísimo porque hay muy pocas viviendas en alquiler y las que hay son muy caras y ponen muchos requisitos para ser alquiladas", destacan desde Boa Vida.

La atención psicológica también es fundamental para quienes son refugiados, sobre todo para aquellas personas que llegan solos a un país que no es el suyo. "Para ellos es un impacto llegar a otro país, con otra cultura y, en muchos casos, otro idioma , por ejemplo, para los ciudadanos ucranianos", sostiene la psicóloga de Boa Vida. "Si tienes una red social, si perteneces a alguna asociación o vienes con tu familia te puedes sentir más acompañado, pero hay casos de gente que viene muy sola", concluye Vilas.

¿Cómo se gestiona el flujo migratorio?
"Pode haber unha crise humanitaria como consecuencia deste conflito", asegura el catedrático de Historia Contemporánea de la USC Núñez Seixas. "Se a guerra dura pouco, ben porque se chega a un armisticio ou porque se desactiva a resistencia militar, e se a poboación civil percibe que xa non hai perigo para eles, o fluxo de refuxiados tenderá a retornar", añade el historiador, que destaca que esto sucede en todos los conflictos.

"Hai unha primeira vaga de refuxiados que fuxe dunha guerra. A cuestión é se despois se instaura un réxime de ocupación severo no que a poboación sufra, entón moitos refuxiados non quererán volver e seguirá saíndo xente do país. É imprevisible, pero de entrada producirase un fluxo de refuxiados notable, que haberá que acoller", explica.

"Tamén hai que ter en conta que Ucraína é unha fronteira terrestre coa Unión Europea e para fuxir non hai que vir en barco", concluye.

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