El pasado 20 de mayo, 802 personas se presentaban en el Recinto Feiral de Silleda al primer examen del proceso selectivo para acceder a 55 plazas del grupo A1 en la escala de veterinarios. Tras la realización del mismo, varios opositores critican el método de selección planteado por la Xunta y hablan de irregularidades en el examen. "Atópome ante un exame que non sei por onde coller. Da parte xeral -30 preguntas- non sei de que me falan a metade delas. As da parte específica nin son proporcionais ó temario nin se adaptan ao posto a desempeñar, moitas están mal formuladas, outras teñen máis dunha resposta...", asegura una de las opositoras.
Otros opositores señalan que había preguntas "fuera de temario, mal contextualizadas, enunciados ambiguos sin hacer referencia a la legislación concreta, con más de una respuesta correcta o con todas las opciones falsas", entre otras. Esto hizo que muchos de ellos presentaran escritos de alegaciones contra varias de las preguntas formuladas en el proceso selectivo.
"Hay gente que ha presentado alegaciones a 38 o 40 preguntas de las 180 totales", explican. A todo esto se suma, según los opositores, que el examen se vio "interrumpido en varias ocasiones por el tribunal para hacer aclaraciones y ese tiempo no se vio descontado del cómputo general, ya insuficiente dada la extensión de los enunciados y las respuestas".
Manolo Jiménez, presidente de la Asociación Sindical de Veterinarios Funcionarios da Xunta de Galicia (Asvef) y profesor en varias academias de preparación de oposiciones, confirma que hay un "aluvión de reclamaciones" y que fue "un examen atípico, con preguntas que sorprenden, se planteaban situaciones un poco prácticas en un examen teórico...". Además, ratifica las quejas de los opositores acerca de las cuestiones fuera de temario o las que "podían tener varias respuestas considerando un real decreto u otro". Así, considera que "lo que ha pasado no tiene mucho sentido".
"Desde el primer momento ha sido un ejemplo de poca profesionalidad y poca seriedad", asegura uno de los opositores en referencia a todo el proceso selectivo, pues afirman que ya tuvieron que enfrentarse previamente a "retrasos en la publicación de la fecha de la oposición o errores en la conformación del tribunal". Esto último fue denunciado por sindicatos como CC OO y CIG, e incluso por el Colegio de Veterinarios de Pontevedra, en los meses previos a la prueba, que impugnaron el tribunal por ser tres de sus cinco miembros funcionarios cuando deben ser menos del 50%.
Mientras que los opositores hablan de que se ha presentado un alto número de impugnaciones, la Consellería de Facenda asegura que a fecha del pasado viernes se habían recibido solo 28 alegaciones, "o que supón menos do 5% das persoas que participaron no exame". Explican además que se trata de "unha práctica ordinaria que se produce en todas as oposicións na Administración pública, e que aumenta nas oposicións máis competitiva". De hecho, recalcan que en las bases de todas las convocatorias se prevén "preguntas de reserva, que substitúen ás anuladas no caso de que o tribunal así o decida, un prazo para a presentación de reclamacións despois de cada exame e a obriga do Tribunal de resolver todas as reclamacións antes de proseguir co proceso selectivo".
Aseguran, por otra parte, que "é falso que a Xunta de Galicia cambiase a data do exame", como denunciaban también algunos de los opositores, y que esta se publicó solo en el Diario Oficial de Galicia del 13 de abril de 2018, "polo que non houbo cambio algún na mesma".
