La nueva ordenanza de movilidad de Pontevedra entrará en vigor antes del verano. Es la fecha que este martes puso el concejal de Mobilidade, Demetrio Gómez Junquera, para la puesta en marcha de la normativa que dará más prioridad al peatón en todos los espacios públicos. "Os peóns son sempre os que teñen a preferencia", recordó el edil del BNG después de la comisión informativa en la que la oposición recibió una copia del texto.
PP y Ciudadanos tendrán hasta el viernes para realizar las aportaciones que estimen oportunas. Lo harán en el marco de la comisión previa al Pleno municipal del lunes que viene, en la que se ratificará la aprobación inicial del reglamento. A partir de entonces, se abrirá un proceso de exposición al público y, con él, la fase de alegaciones. Los interesados dispondrán de un plazo de un mes para reclamar cambios en el documento.
Gómez Junquera informó de que el borrador de la normativa, que recibió las aportaciones de un particular y del colectivo ciclista Pedaladas en una consulta pública previa a través de la página web municipal, ha sufrido pequeños retoques desde su presentación a los medios de comunicación el pasado 2 de enero.
El de mayor calado afecta a la edad de circulación para las personas que utilizan patinetes eléctricos, que se eleva de doce a 15 años para no diferir de las recomendaciones de la Dirección General de Tráfico (DGT). El reglamento pontevedrés establece que los conductores de los vehículos de movilidad personal solo podrán transitar por las carreteras limitadas a 30 kilómetros por hora o por las vías con una velocidad menor.
La modificación más anecdótica se refiere al nombre del código de circulación municipal, cuyo título se cambia de orden por cuestiones de carácter jurídico. A partir de ahora pasará a llamarse Ordenanza reguladora da utilización dos espazos públicos e da mobilidade amábel.
Se limitará la velocidad a 10 km/h en vías rurales municipales sin aceras o arcenes de menos de 1,5 metros.
Patinetes eléctricos y bicis
No podrán circular por aceras o sendas. Sí podrán hacerlo en áreas como el casco histórico o el centro adaptándose a la velocidad del peatón.
Patinetes recreativos
Los menores de 12 años podrán jugar con sus patinetes sin molestar al peatón. Y podrán ir en bici por la acera si no superan los 6 km/h.
Las sillas de ruedas
Las personas que vayan en silla de ruedas u otros vehículos que garanticen su movilidad tendrán los mismos derechos que el peatón.
El tamaño de los lombos
El tamaño de los lombos se unificará. Tendrán el mismo diseño y la distancia entre ellos será de entre 25 y 100 metros.
Aparcar en aceras
Se prohibirá aparcar o parar un coche encima de aceras. Se permitirá parar en la calzada solo en casos de emergencia y por dos minutos.
DE 1989. La puesta en marcha de la normativa local supondrá, en la práctica, la derogación de la de 1989, que se ha quedado obsoleta por la transformación urbana de la ciudad y las nuevas formas de desplazamiento.
Una de las novedades del reglamento pontevedrés afecta a las parroquias. Las pistas del rural que estén en manos del Concello serán de prioridad peatonal, lo que obligará a los conductores a extremar las precauciones. En las vías que no tengan aceras y en aquellas en las que los arcenes sean de menos de 1,5 metros, los vehículos deberán moderar su velocidad a diez kilómetros por hora.
La ordenanza también obligará a que todos los vehículos circulen por la calzada. Y esto incluye a bicicletas y patinetes eléctricos, que no podrán transitar por las aceras y otras áreas estrictamente peatonales. Por donde sí podrán pasar es por el casco histórico o en zonas de coexistencia, como las plataformas únicas. En caso de hacerlo por estas últimas (Michelena, O Gorgullón o Lepanto, por ejemplo) deberá ser a una velocidad moderada y nunca superior a seis kilómetros por hora.
Las carreras y otras competiciones quedarán prohibidas. La única excepción serán los menores de doce años, que podrán jugar con sus bicis y patinetes recreativos en espacios libres sin necesidad de estar en compañía de un adulto. Eso sí, sin generar molestias al peatón.
HASTA 500 EUROS. La ordenanza también hará hincapié en los estacionamientos prohibidos en aceras para evitar daños en este tipo de elementos de la reforma urbana. Las personas que transporten un bulto, a personas enfermas o con diversidad funcional podrán parar de forma excepcional en la calzada, pero por un máximo de dos minutos para no interrumpir la circulación. En áreas de coexistencia, como el casco viejo o en zonas de plataforma única, se podrá estacionar de forma libre, pero por un máximo de diez minutos.
El reglamento luchará también contra la contaminación acústica, sobre todo en horario nocturno. Los conductores deberán evitar ruidos, por lo que no se podrá tocar el claxon, salvo en casos de extrema necesidad. Tampoco se podrá circular con la música a todo volumen o a escape libre.
La normativa municipal, que prevé multas de 200 a 500 euros, según la gravedad de los casos, incorporará además las zonas con límite 30 y 10. En las áreas de preferencia peatonal, todos los vehículos (con o sin motor) no podrán superar los seis kilómetros por hora ni tampoco circular a menos de dos metros de portales, garajes o cruces. En cuanto a los lombos, su tamaño se unificará, adaptándose a la altura de las aceras.
