El paro aumenta en Pontevedra por segundo mes consecutivo por la inestabilidad en el sector servicios. La capital provincial cerró febrero con 5.904 desempleados, 72 más que en enero. Casi siete de cada diez parados, 3.800 en total, proceden de actividades profesionales del ámbito terciario. Son 58 más que el mes anterior.
La construcción fue el único sector que redujo el número de desocupados en el municipio al pasar de 368 a 366 en el último mes. La buena racha del ladrillo, empujada por el bum inmobiliario y el repunte de la obra pública, contrasta con la que atraviesa la industria, que suma nueve desocupados y se sitúa en 423.
Los parados de larga duración, que son los que llevan más de un año sin empleo, también superan a los de la construcción. En febrero se contabilizaron 371, cuatro más que en enero. Por su parte, el nivel de paro en la agricultura y la pesca también repunta. Lo hace con tres nuevas altas, que elevan a 130 la cifra de desocupados en este ámbito.
El único dato positivo del balance hecho público este miércoles por la Xunta tiene que ver con la tasa de paro interanual. Vuelve a bajar y sitúa a Pontevedra con un mejor pronóstico que hace un año. De los 5.952 parados de febrero de 2021 se pasó a los 5.094 de 2022. Son 498 menos, esto es, una bajada del 14,4%.
Los registros laborales también revelan que la ciudad despidió su mejor febrero desde 2008, año en el que se inició la crisis financiera, que afectó a todo el mundo a raíz del estallido de la burbuja inmobiliaria en Estados Unidos por las denominadas hipotecas basura. Entonces, el número de desocupados en el municipio era de 4.828 vecinos.
BRECHA. La brecha de género en el mercado laboral pontevedrés se amplía. El paro femenino se situó el pasado febrero en el 59,1%, lo que supone casi un punto más que en el mismo período del año pasado. Un total de 3.010 mujeres están anotadas en las antiguas listas del Inem como demandantes de empleo. El porcentaje de hombres en la misma situación es menor, el 40,9%, lo que se corresponde con 2.084 hombres desempleados en la ciudad.
Por edades, la mayor parte de los desocupados de Pontevedra superan los 25 años. En este tramo se encuentran 4.926 personas. De ellas, 2.927 son mujeres y los 1.999 restantes son hombres.
El paro entre menores de 25, 168 en total, tiene una brecha de género menor: 85 parados son hombres frente a 83 mujeres.
COMARCA. Solo uno de los ocho concellos de la comarca de Pontevedra redujo su tasa de paro respecto al pasado mes de enero. Fue Campo Lameiro, que pasó de 105 a 96 desempleados, nueve menos.
Poio sumó 21 parados y se sitúa en 1.021; Barro añadió 16 y tiene 220; A Lama incrementó la lista en once y alcanza los 145; Ponte Caldelas registró diez desocupados más y su cifra total es de 406; Cerdedo-Cotobade aumentó en siete el número de parados y suma ya 296 y Vilaboa pasó de 326 a 329 desocupados, tres más que en enero.
De los 62 municipios de la provincia, en 41 subió el paro, en 19 bajó la tasa de desempleo y en dos se mantuvo igual.
