El Partido Popular reclama la "renovación urgente" del contrato de la basura de Pontevedra. El edil Iago Acuña manifestó este viernes, a través de un comunicado de prensa, que la mejora de este servicio debe ser una "prioridad" para el Gobierno local tras afear la "falta de interés y mala gestión" del Ejecutivo local tras las sucesivas prórrogas de la concesión.
El principal partido de la oposición aludió al "aumento de las quejas de los vecinos de las zonas más castigadas por la suciedad que se acumula", una circunstancia que aseguran que afecta tanto al centro de la ciudad como a las parroquias del rural.
Acuña aseguró que, tras visitar distintos puntos del municipio, se ha encontrado con "contenedores en muy mal estado" o "vertidos incontrolados". En este último caso, denunció, "pasan demasiados días sin recogerse, lo que supone un riesgo medioambiental".
"La basura se acumula en el suelo porque no hay la capacidad suficiente de recogida en los puntos habilitados", añadió el edil del PP, que ofreció al Concello el respaldo de su formación para crear una mesa de trabajo que logre sacar adelante el nuevo contrato "realista". El objetivo es, según Acuña, corregir "la alarmante falta de personal y los medios obsoletos con los que cuenta Pontevedra".
La formación de derechas considera "insostenible" la situación de la recogida de residuos y la limpieza viaria en la capital provincial. Y recuerda que hasta el propio alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, ha admitido por primera vez que el servicio es "manifestamente mellorable".
El contrato de basuras que impulsó el Concello quedó desierto durante el pasado mandato. La falta de interés de las empresas motivó que ninguna firma del sector pujase por esta concesión.
El anterior concurso estaba presupuestado 233,4 millones de euros (a razón de 11.669.786 euros al año) y su duración era de 20 años. Tras el fracaso de este proceso, el Concello abrió la puerta a la posibilidad de que el servicio se sacase de nuevo a licitación por un período inferior, y más flexible.
En la actualidad, el contrato lo presta la empresa Prezero, que inicialmente se llamaba Cespa y que luego pasó a denominarse Ferrovial Servicios. La concesión se firmó en el año 1999, cuando el popular Juan Luis Pedrosa todavía era alcalde (en funciones) de Pontevedra.