Las condiciones son las mismas que se dieron durante el verano de 2006

PONTEVEDRA "Pasamos miedo, mucho miedo. Estábamos rodeados"

Vecinos de Bora, Lérez, Campañó y Ponte Sampaio vivieron horas de zozobra con los incendios forestales calcinando sus parcelas ► Las llamas han devorado más de 1.000 hectáreas en tres días en Pontevedra y sus alrededores y la máxima alerta continuará durante las próximas jornadas
El humo causó graves problemas en Sampaio
photo_camera El humo causó graves problemas en Sampaio

"Lo veíamos muy negro. Llegamos a estar muy preocupados. Abandonar la casa era lo último que podíamos hacer, pero pasamos miedo, mucho miedo. El incendio pasó por encima de la casa y prendió otro foco delante. Estábamos rodeados". Miguel, vecino de Bora, explicó así los momentos que le tocó vivir en la última fase del gran incendio que, con focos iniciales en Tenorio, concluyó adentrándose en el término municipal de Pontevedra.

En la madrugada del miércoles, con la situación controlada en el este del municipio, la zozobra se trasladó al norte. Bomberos, brigadistas de la Xunta y medios aéreos permanecieron durante varias horas junto a varias viviendas de O Castelo, en su parte alta (cerca de la vecina parroquia de Xeve). Por la tarde, el fuego había remitido. En ese instante, sobre las 16.30, una densa nube de humo se vislumbraba, una vez más, sobre el cielo de la ciudad del Lérez. Procedía del sur. Con un gran incendio en Soutomaior todavía activo, la parroquia de Ponte Sampaio, limítrofe con Arcade y extremo sur de Pontevedra, es el escenario del último gran incendio de la actual oleada. Varias casas fueron desalojadas en los lugares de Vilar, Acevedo y O Rañadoiro. El fuego y sobre todo el humo se convirtieron en un riesgo evidente para la integridad física de los habitantes.

La Consellería de Medio Rural e Mar de la Xunta de Galicia puso en marcha el mismo dispositivo de emergencia que, con un notable éxito, se desarrolló en días anteriores en Tenorio, Bora y Soutomaior, declarando el nivel 2 de alerta y trasladando al lugar del incendio importantes medios para la extinción, incluidos brigadistas, motobombas y un helicóptero. "El despliegue fue extraordinario, brutal. Una brigada que vino de León (la Unidad Militar de Emergencias) realizó un gran trabajo", explicó Miguel, muy agradecido.

Ya se han sobrepasado las 1.000 hectáreas quemadas, solo en Pontevedra y en sus alrededores, teniendo en cuenta los grandes incendios de Tenorio-Bora, Soutomaior, Lérez y Ponte Sampaio, además de otros más pequeños que se declararon en puntos tan dispersos como Verducido o Campañó, donde trabajaron efectivos del parque municipal de la ciudad del Lérez.

Comentarios