¿Qué pasará si Ence echa el cierre? Más de 5.000 empleos, en el aire

El posible cierre de la mayor industria de la comarca abre un abanico de interrogantes sobre los efectos que supondría la marcha de Celulosas
Participantes en una de las últimas movilizaciones de los trabajadores de Ence. JAVIER CERVERA-MERCADILLO
photo_camera Participantes en una de las últimas movilizaciones de los trabajadores de Ence. JAVIER CERVERA-MERCADILLO

Las sombras del cierre nunca se han aproximado tanto a la fábrica de Ence y uno de los efectos más inmediatos es que la incertidumbre que planea sobre la planta, que ya era sonora, ha explosionado en nuevas dudas. Estas son algunas de las que están sobre la mesa.

¿Qué supondría el cierre para Pontevedra y su entorno?


Nadie tiene una bola de cristal que permita adivinar el impacto del cese de la pastera, pero existen varios indicadores que permiten augurar que el golpe en la economía local e incluso gallega será notable. La planta dispone de una plantilla fija de 400 empleados a los que se unen 2.700 puestos de trabajo de contratistas del área industrial, logística y del transporte, y otros 2.100 del sector forestal (según cifras aportadas en su día por la compañía). La pastera exporta el 95% de su producción, lo que genera un tercio de los tráficos del Puerto de Marín. En términos porcentuales aporta un 28% del PIB de Pontevedra y, según comunicó recientemente, solo en 2020 adquirió materiales, servicios y materia prima por valor de más de 140 millones de euros.

El cese implicaría el despido de 400 trabajadores y la rescisión de contratos con más de 4.000 indirectos

¿Qué pasaría con los puestos de trabajo? ¿Cabe el traslado?


Las empresas del sector forestal que aportan la materia prima podrían seguir nutriendo a la empresa, que tiene previsto mantener e incluso ampliar su centro de producción de Navia. En cambio, los trabajadores de Lourizán tienen su futuro mucho más comprometido. La empresa ha sido tajante y ya ha dicho que "en las demás plantas de la compañía no tenemos necesidad de más personal" y que la construcción de una nueva planta es inviable. La empresa cierra las puertas al traslado.

¿Cuál sería el futuro de los terrenos de Lourizán?


Ence Energía y Celulosa está obligada a revertir los terrenos al Estado en las condiciones previas a su ocupación. Fuentes consultadas aseguran que esta actuación implicaría una inversión de varios cientos de millones de euros que debe asumir la compañía. Lo que se desconoce es cuándo se debería hacer esta recuperación, si en el momento en el que renuncia a seguir ocupando los terrenos o cuando caduque la concesión, actualmente prorrogada. El Gobierno local ha demandado en varias ocasiones la recuperación paisajística de los terrenos, pero sería una actuación parcial. La autovía y la depuradora también ocupan esta franja de dominio público marítimo-terrestre.

La empresa debe revertir al Estado los terrenos de Lourizán en circunstancias similares a antes de la ocupación

¿Si el Estado reforma la Ley, qué futuro le depara a Ence?


Ence advierte de que cerrará si el Estado no reforma el artículo 18.4 del proyecto de la Ley de Cambio Climático. Las posibilidades de que esto suceda son reducidas, pero en el supuesto de que el Gobierno ceda, ¿qué pasaría con Ence? La respuesta acepta variables, pero es obvio que el futuro dependería de los tribunales, que deben decidir si la prórroga vigente (concedida en 2016 por 60 años) es legal o no. El Concello, la APDR y Greenpeace la recurrieron porque consideran que vulneran dos normas: la Ley de Patrimonio de las Administraciones Públicas de 2003, que establece un tope de 75 años, y la Ley de Costas, que establece reserva el dominio público marítimo-terrestre para las actividades que no se puedan desarrollar en otro emplazamiento. Por tanto, Ence podría seguir funcionando hasta tres fechas límites posibles: 2033, que es cuando se cumpliría el tope de 75 años; 2073, año en el que finaliza la prórroga vigente, o una vez que llegue la sentencia definitiva (siempre y cuando sea favorable a los demandantes).

¿Cómo está trabajando la empresa en la actualidad?


La empresa mantiene el ritmo de producción en Lourizán, pero las inversiones previstas se detuvieron en 2019, después de que la Abogacía del Estado se allanara en la defensa de la prórroga. El grupo empresarial tenía previsto invertir en Pontevedra cerca de 250 millones de euros para optimizar el proceso de producción entre ese año y 2023, pero finalmente solo ejecutó las partidas reservadas para 2019. Los cerca de 200 millones restantes se trasladaron a Navia, donde están a la espera de ser invertidos con vistas a ampliar la capacidad de producción. Por el contrario, entre 2016 y 2019, sí mantuvo el ritmo inversor previsto, lo que se tradujo en una inyección de 132 millones en la planta de Lourizán.

La empresa derivó cerca de 200 millones de euros comprometidos para Pontevedra a Navia tras el allanamiento de la Abogacía del Estado

¿Podría reclamar Ence algún tipo de indemnización?


Sí. En el supuesto de que los juzgados acaben anulando la prórroga concedida en 2016 por el Gobierno de Mariano Rajoy, la empresa podría reclamar indemnización por lucro cesante, aunque se desconoce qué importes podría reclamar. El grupo registró en 2020 unas pérdidas acumuladas de 26 millones, frente a los 9 millones de beneficio registrados en 2019.