Quince meses después de que Diario de Pontevedra desvelase que la antigua Ferretería Varela tendría una segunda vida de la mano del cocinero Pepe Vieira esta semana comenzaron los trabajos para transformar el inmueble en un asador en el que el fuego será protagonista ya que todo se preparará a la brasa. "No habrá fogones", señaló.
Una vez concedida la licencia municipal tras finalizar los distintos trámites urbanísticos, los obreros comenzaron a retirar distintos objetos que todavía estaban en el local para iniciar en los próximos días la reforma del edificio.
El edificio, que se encuentra en la Praza de Curros Enríquez, tiene cuatro plantas (en la entreplanta se instalará la cocina) y dispone de amplios ventanales hacia la fachada.
Pepe Vieira explicó, tras trascender el acuerdo con los propietarios, que lo explotará en régimen de alquiler y reconocía que la negociación con Rafa Varela había sido larga y estuvo condicionada por la pandemia.
Asimismo el cocinero, que dirige un restaurante gastronómico con dos Estrellas Michelin en Camiño da Serpe, el Ultramar en el Museo de Pontevedra y el Pazo de Buzaca en Moraña, reconocía que cuando "vin por primeira vez o edificio naoreime del é un espectáculo".
Ferretería Varela cerró sus puertas en 2016 tras la jubilación de su último dueño, Rafael Varela y tras 141 años de historia. Aunque su última ubicación fue la del número 4 de la calle Don Gonzalo, el comercio se fundó en 1875 en el edificio que hoy ocupa el Casino Mercantil y que, actualmente, está en venta.
La céntrica plaza de Curros Enríquez ha visto echar el cierre a otros negocios con solera, entre ellos la tienda de moda Peral y la Droguería Moderna.
