Conchi Álvarez: "Percibimos un aumento de novas familias que veñen a pedir axuda"

Las familias monomarentales con menores son las principales demandantes de apoyo social, según la directora de Cáritas
La presidenta de Cáritas Pontevedra, Conchi Vazquez. DP
photo_camera La presidenta de Cáritas Pontevedra, Conchi Vazquez. DP

La escalada de precios de la alimentación y la energía que ha puesto a las familias contra las cuerdas también ha empujado a más personas a demandar la ayuda de organizaciones como Cáritas Interparroquial. Hasta las propias parroquias o al centro principal de la organización acuden hoy más personas que hace un año para solicitar alimentos, ayudas para los libros de texto en el inicio del curso escolar, ropa o dinero para afrontar la factura energética.

Tal y como explicó la directora de la organización, Conchi Álvarez, "están vindo a Cáritas familias e persoas que nunca antes tiveran a necesidade de solicitar axuda". Para Álvarez, esto es un indicador claro de la situación social que se vive. "Vén xente que igual está traballando pero á que non lle chega. Hoxe en día ter traballo non significa que lles chegue para os gastos", añadió.

"A demanda de alimentos ou pago de recibos é o que máis se reclama, sobre todo familias con menores, monomarentais principalmente, ou familias cos dous membros pero con ingresos insuficientes porque están en paro ou traballan poucas horas", concluyó la directora de Cáritas en Pontevedra.

A demanda de alimentos ou pago de recibos é o que máis se reclama, sobre todo cando hai menores na casa

Además, esta organización recoge ropa en buen estado que vende después en el ropero social entre los usuarios aunque, subraya, que de ropa es de lo que menos demanda hay. "Temos unha rede de contedores nas parroquias, aí recóllese a roupa, envíase a Santiago, onde se selecciona a que está en bo estado e pasa polo ferro para que volva para quen o precisa", concluyó.

Perfil
Hombres en paro y sin ingresos
La mayoría de personas que pasan por el centro San Javier de Monte Porreiro son gallegos sin trabajo ni ingresos. Solo unos cuantos perciben la Renda de Inserción Social de Galicia que les da para vivir en una pensión durante cierto tiempo. Entre los extranjeros que pernoctan en estas instalaciones figuran alemanes, austríacos, búlgaros y polacos. La mayoría de los usuarios acuden al centro lo hacen por propia iniciativa, aunque en ocasiones son derivados por los servicios sociales municipales.

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