Los esqueletos sentados desde hace unos días a una mesa de la Praza de España de Pontevedra no han conseguido superar enteros las celebraciones del Samaín. Tras la intensa noche de juerga del sábado, dos de ellos han aparecido este domingo sin cabeza, que solo mantiene uno de los componentes del trío.
Estos "visitantes de ultratumba", acompañados de otro que trabaja la tierra con un gran arado, forman parte de una intervención realizada en el marco del proyecto Xardíns que Falan, impulsado por la Concellería de Desenvolvemento Sostible e Medio Natural con motivo de la celebración del Samaín.
El decorado se completa con calabazas, velas, fardos de paja y telas de araña.