La plantilla municipal de Pontevedra tendrá un horario más flexible para mejorar la conciliación de la vida personal y laboral. La Xunta de Goberno local aprobó este lunes la instrucción dada por la concejala de Persoal, Carmen Fouces, para poner en marcha un nuevo sistema de trabajo en el Concello que ampliará la jornada de 7.00 a 20.30 horas.
Todos los trabajadores mantendrán el horario fijo que está previsto hasta ahora, de 9.00 a 14.30 horas. La diferencia se establecerá en el variable, que podrá realizarse a entre las 7.00 (y no media hora más tarde, a las 7.30 horas) y las 9.00 y entre las 14.30 y las 20.30 horas hasta completar las 35 horas obligatorias por semana.
La portavoz municipal, Anabel Gulías, señaló que la orden dada por Persoal cuenta con el visto bueno de la Mesa Xeral de Negociación, en el que están representados los delegados sindicales del Concello.
A preguntas de los periodistas, la edil nacionalista se refirió también a la posibilidad de implantar el teletrabajo en la Administración local. "Estamos nese camiño", afirmó, si bien recordó que este sistema de trabajo desde casa no podría hacerse extensivo a todos los casos y servicios, ya que algunos de ellos mantienen la atención al público.
De este tipo de cuestiones laborales se ocupará el nuevo director general de Recursos Humanos, José Manuel González Abal, nombrado a finales del mes pasado.
