La Policía Local alerta sobre la falta de seguridad vial en Ponte Sampaio

El Concello pedirá a la Xunta que humanice el tramo urbano que cruza la parroquia y que es autonómico
 

Vista de peatones cruzando el puente de Ponte Sampaio. RAFA FARIÑA
photo_camera Vista de peatones cruzando el puente de Ponte Sampaio. RAFA FARIÑA

La seguridad vial en Ponte Sampaio está en entredicho. Un informe elaborado por la Policía Local advierte del peligro al que se exponen tanto peatones como ciclistas en esta parroquia. El motivo reside en que faltan medidas correctoras para la carretera que atraviesa el pueblo, la PO-264. El vial, que es de titularidad autonómica, nace en el núcleo de Paredes (Vilaboa) y termina en Arcade (Soutomaior). Tanto en su inicio como en su final confluye con la carretera de Santiago, la N-550.

La situación de riesgo llevó al Concello a encargar un estudio en la zona, centrado en los dos primeros kilómetros, los que atraviesan el municipio de Pontevedra. La decisión se produjo después de que la Dirección General de Tráfico (DGT) se pusiera en contacto con el Gobierno local alertando sobre esta situación, que previamente habían denunciado los vecinos del lugar. Concretamente, la queja fue presentada por al Asociación de Veciños de Santa María de Ponte Sampaio, en la que señalaba que los conductores no respetaban las señales de circulación.

Las conclusiones del informe policial de Pontevedra, en el que se adjuntan fotografías y una gran cantidad de datos, son demoledoras. Para evitar accidentes, la Jefatura insta, a través de su servicio de Mobilidade, a humanizar la carretera que atraviesa la parroquia porque "presenta carencias importantes no eido da seguridade viaria e accesibilidade".

Los agentes solicitan que se pongan en marcha cuatro actuaciones: la erradicación de los excesos de velocidad, eliminar las barreras y obstáculos en las aceras, aumentar las zonas de paso seguras y dotar a los servicios públicos con más aparcamientos.

El Concello remitirá próximamente el informe a la Xunta para que impulse obras en la zona y aplique varias medidas correctoras. Entre ellas, que se limite a  30 kilómetros por hora la zona de intersección del Camiño Portugués, concretamente en la entrada al pueblo y cien metros antes del centro de salud. También se propone elevar los tres pasos de peatones existentes e instalar ‘lombos’ a la altura del ambulatorio y del puente romano.
 

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