Libertad para los investigados pese a incautarles drogas para 'fabricar' 10.000 dosis

400 gramos de speed, 178 de hachís, 660 de marihuana, 53 de cocaína y uno de heroína, retirados del mercado ilícito
Uno de los investigados, accediendo al juzgado. JAVIER CERVERA-MERCADILLO
photo_camera Uno de los investigados, accediendo al juzgado. JAVIER CERVERA-MERCADILLO

Una vez más, el buen hacer de los investigadores de las fuerzas de seguridad no halló la respuesta que esperaban en sede judicial. La operación Guarloc, un trabajo conjunto entre la Compañía de Pontevedra del Instituto Armado y la Policía Local de la Boa Vila, fue un éxito a medias. Ello es así después de que todos los detenidos el martes hayan sido puestos en libertad, incluidas las personas que, a ojos de los agentes, eran los responsables de una de las redes de venta de drogas al menudeo más activas de cuantas se mantenían vivas en la ciudad y en la comarca.

Horas antes de las comparecencias en A Parda, que se extendieron durante toda la mañana y parte de la tarde, Benemérita y Policía Municipal informaban del saldo del despliegue del martes, que incluyó media docena de registros en varios puntos, desde Manuel del Palacio hasta Monte Porreiro o Paseo de Colón, pasando por la calle Peregrina y, especialmente, en una propiedad del lugar de Matalobos, en Salcedo.

Precisamente fue en una vivienda anexa que los dueños de esta última propiedad tienen alquilada a uno de los investigados donde apareció buena parte de la droga, según pudo saber este periódico. Este lugar y el piso en el que reside el presunto cabecilla fueron objeto de un rastreo de lo más minucioso, hallándose, además, 16.600 euros en efectivo.

La operación conjunta de la Guardia Civil y la Policía Local sirvió para atacar a la cabeza de la mayor red de menudeo de la Boa Vila

En concreto, la Guardia Civil y la Policía Local incautaron 400 gramos de anfetaminas en polvo (que, una vez adulteradas, servirían para generar unas 4.000 dosis de speed); 53 gramos de cocaína, 178 gramos de hachís, 660 gramos de marihuana y más de tres kilos de sustancia de corte. Esto último, precisamente, da cuenta de la capacidad real de los detenidos, pues es un claro indicio de que disponían de los medios necesarios para mezclar unas sustancias con otras y multiplicar sus beneficios, manteniendo el mercado ilícito abastecido.

Otros hallazgos de interés fueron seis básculas de precisión (utilizadas por quienes se dedican a la venta de sustancias estupefacientes para medir cada una de las dosis antes de distribuirlas), nueve armas blancas, una pistola de aire comprimido, varios ordenadores portátiles, numerosos teléfonos móviles y los citados 16.600 euros en efectivo.

Ya por la tarde, tras la presentación de los cinco detenidos que quedaban en la Comandancia en sede judicial, todo apuntaba a que al menos dos de los investigados ingresasen en el centro penitenciario de A Lama de forma preventiva, dados los indicios que pesaban contra ellos y sus antecedentes por delitos similares.

Sin embargo, y en contra de la opinión de la Fiscalía Provincial (que solicitó prisión para ambos), el juez instructor decretó la puesta en libertad provisional con una medida cautelar: la comparecencia quincenal en sede judicial de cada uno de ellos.

Reincidente: el mismo de la moto de la heroína
Los investigadores se encontraron con dos sorpresas tras conocer la decisión judicial: la puesta en libertad del presunto cabecilla, R.G.P., y de uno de sus supuestos colaboradores, G.S.G.
Uno y otro tienen antecedentes policiales, y sorprendió especialmente el caso de este último, pues ha sido detenido hace pocas semanas en posesión de 120 dosis de heroína listas para su venta.
G.S.G. fue interceptado en una moto, la misma moto que apareció el martes en el interior de la propiedad registrada en Salcedo. Tras aquellos hechos se hallaba en libertad provisional por orden judicial.

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