Un pozo sin tapar a cien metros de distancia del colegio público de Ponte Sampaio ha puesto en alerta a los vecinos de esta parroquia, temerosos de que pueda ocurrir un caso similar al de Julen, el pequeño de Totalán (Málaga) que fue engullido por un pozo sin sellar, un suceso que conmocionó a la opinión pública y que finalizó de forma trágica.
El peligroso foso se encuentra en la parcela donde el Concello está construyendo el nuevo campo de fútbol, cuyas obras permanecen paralizadas desde antes de Navidad por los problemas económicos que afectaron a la empresa adjudicataria, Ediserpo. Ahora, la UTE EC Casas-Imesapi, se hará cargo de los trabajos pendientes en los terrenos situados en el lugar de Xunqueira-Fontaíña.
OBRAS PENDIENTES. La actuación para la creación de las nuevas instalaciones deportivas, adjudicada en su día por 1.163.536 euros, comenzó en agosto de 2018 y hasta ahora está ejecutado un tercio del total. El precio incluía la demolición de la instalación actual y su reubicación en un terreno adquirido para tal fin por la Administración local.
La junta directiva de la asociación Héroes de Ponte Sampaio 1809 ha dado la voz de alarma después de recibir varias quejas tanto de vecinos de la zona como de padres y madres de escolares, dado que en las proximidades se encuentran el centro educativo, el viejo campo de fútbol y las instalaciones del club de piragüismo, donde muchos escolares practican a diario su deporte favorito.
Ramón Agulla: Las obras están paralizadas desde hace tres meses con un peligro latente, ya que dejaron destapada la boca de un pozo artesano
"Las obras están paralizadas desde hace tres meses con un peligro latente, ya que dejaron destapada la boca de un pozo artesano utilizado por los antiguos propietarios de los terrenos", explica Ramón Agulla, presidente de la entidad vecinal. "Si no alertamos antes del peligro –precisa– fue porque pensábamos que las obras no permanecerían paradas tanto tiempo y que se retomarían de inmediato".
El dirigente vecinal comenta que "la constructora dejó todo abandonado y no adoptó ninguna medida de precaución con el hueco del pozo, al que puede acceder cualquier persona porque está sin sellar y sin señalizar. El lugar solo está protegido por una simple red que está rota", subraya el directivo de Héroes de Ponte Sampaio 1809.
El representante del colectivo vecinal considera que el Concello debería adoptar "medidas urgentes para evitar desgracias que todos conocemos y vivimos recientemente en otros lugares" (entre ellas el caso Julen). Además, argumenta que es precisa una rápida actuación "dada la cercanía de viviendas, colegio y entidades deportivas a donde acuden niños de corta edad, que no son conscientes del peligro que respresenta un pozo abierto y sin señalizar".
La agrupación vecinal efectúa un llamamiento al Concello para que actúe con celeridad y proceda al sellado del pozo, además de adoptar las medidas necesarias para impedir el acceso a las obras del campo y, de esta forma, "evitar males mayores".
En estas obras no solo hay un pozo sin sellar, sino que también hay hierros de la cimentación que resultan peligrosos. Cualquier persona puede herirse con ellos
PROFUNDIDAD. Ramón Agulla desconoce la profundidad que alcanza el pozo, si bien da por hecho que "puede ser de varios metros, suficientes como para poner en riesgo la vida de quien pueda caer a su interior".
Además, echa en falta una mayor vigilancia por parte del Concello en las obras que contrata. Entiende que para evitar situaciones de riesgo como la del pozo sin sellar la Administración municipal debería efectuar un seguimiento y realizar inspecciones puntuales.
"En estas obras no solo hay un pozo sin sellar, sino que también hay hierros de la cimentación que resultan peligrosos. Cualquier persona puede herirse con ellos porque la parcela carece de un cierre sólido que impida la entrada", apostilla Agulla.
La asociación de vecinos Héroes de Ponte Sampaio 1809 denuncia que la falta de un cierre adecuado en los terrenos en los que el Concello acomete las obras del nuevo campo de fútbol de la parroquia propicia la entrada de cualquier persona y el robo del material utilizado en la construcción de las instalaciones deportivas.
"Una noche, días después de la paralización de las obras, los ladrones apagaron el alumbrado de la zona para apoderarse de parte del material que la empresa Ediserpo utilizaba en los trabajos", explica el presidente vecinal, Ramón Agulla. "Lo raro es que no haya habido más robos, porque cualquiera puede entrar en la parcela".
La nueva instalación se está levantando casi al lado del actual campo de fútbol, en una parcela de 11.000 metros cuadrados que el Concello compró en 2017 a dos vecinos de la parroquia. Las dos fincas costaron 122.000 euros.
El campo contará con las características exigidas por la FIFA, de modo que podrá acoger competiciones oficiales si se diese el caso.
