El Ayuntamiento de Pontevedra otorgará una renta social a personas o familias en riesgo de exclusión, una iniciativa impulsada por la formación Marea que ha contado con el respaldo unánime de la Corporación local.
Una partida presupuestaria de 425.000 euros estará destinada a esa renta que, según la normativa prevista, establece que los beneficiarios cobrarán un mínimo de 403,38 euros, el 75% del indicador público de renta de efectos múltiples, una cantidad que irá en aumento en función del número de miembros de la unidad familiar hasta un tope de 726,08 euros.
El departamento encargado de gestionar los servicios sociales municipales calcula inicialmente que podría tneer unos 75 beneficiarios de esta ayuda, que será percibida durante seis meses, prorrogables a un máximo de un año e incompatible con la Risga, una renta similar que atribuye la Xunta y que ya perciben en Pontevedra 330 familiares.
La edil de Bienestar Social, Anxos Riveiro, ha reconocido que la tramitación de esta renta ha sido "compleja" porque los técnicos tuvieron que "compatibilizar" esa labor con la de otros expedientes "igual de importantes" para los servicios sociales.
La concejala de Marea Pontevedra Mari Carmen Moreira ha lamentado que los trámites para establecer esa renta social se hayan demorado durante un año y diez meses, por lo que los beneficiarios no puedan recibirla como mínimo hasta marzo próximo.
Ese retraso también ha sido criticado por representantes de las formaciones PP y PSOE, aunque los socialistas han felicitado al Gobierno municipal por suplir la "ineptitud" de la Xunta en el desempeño de sus competencias en el ámbito social.
