Una de cal y una de arena. Es lo que deja el comportamiento del mercado laboral el pasado mes de julio en la ciudad capitalina, donde el paro bajó con mucha más contundencia que en otros territorios, pero con bastante menos intensidad de lo que venía siendo costumbre.
Con números exactos, Pontevedra cerró el mes con 4.667 parados, 92 menos que en junio, lo que significa una bajada intermensual del 1,9%. Según los datos publicados ayer por la Consellería de Promoción de Emprego e Igualdade, ninguna de las otras seis ciudades gallegas se aproxima a este porcentaje. Vigo es la que más se le acerca (con un descenso del 0,53%), pero Lugo y Santiago han engordado las listas de demandantes de empleo en uno de los meses más fuertes del año a nivel contratación, y Ourense se ha quedado exactamente igual que antes de dar salida a las vacaciones de verano, con 6.447 personas buscando trabajo.
El volumen de desempleados que maneja Pontevedra es, además, el más bajo que se registra en un mes de julio desde el año 2008. ¿Qué sucede? Que la serie histórica también pone de relieve que la caída del desempleo es la más floja de los últimos 18 años, en los que la bajada del paro osciló entre el 2,7% y el 6%.
¿A qué se debe el fenómeno? Las estadísticas no entran en detalles, pero dan pie a lecturas dispares. El Gobierno central vincula la situación (y particularmente la subida de parados registrada a nivel nacional) a la reforma laboral, que ha aumentado la contratación indefinida y reducido la temporal, mientras los díscolos creen que las cifras ponen en evidencia la recesión económica y la necesidad de reformas.
PARO POR SECTORES. En el caso particular del municipio pontevedrés, la bajada del paro se ha concentrado en el último mes en la industria (que ha pasado de 417 a 381 desempleados) y la construcción (que ha pasado de 356 a 339). Por el contrario, el sector servicios sigue reuniendo el grueso de los parados (tres de cada cuatro), situándose en julio en 2.483 demandantes (tan solo 12 menos que en junio). Otros 115 buscan trabajo en el campo de la agricultura y pesca, y 349 aún no han tenido la oportunidad de estrenarse en el mercado laboral.
El abanico de demandantes choca contra las necesidades de personal de la patronal ya que muchos de estos sectores que cuentan con una base amplia de posibles candidatos acusan, a la vez, un importante déficit de personal.
La industria y la hostelería están a la cabeza de los sectores que están encontrando más dificultades para contratar personal este verano. Así lo llevan trasladando desde hace un tiempo las organizaciones empresariales y así lo ratificó ayer la Fundación Amigos de Galicia, cuyos servicios de integración laboral están comprobando que hay determinados perfiles (cada vez más) que son especialmente difíciles de cubrir.
PUESTO MÁS DEMANDADOS. A nivel industrial la entidad asegura que "sigue en alza la demanda de operarios para todo tipo de industrias", entre los que destaca auxiliares de fábrica de alimentación, operarios de congelados, profesionales de logística y producción, trabajadores de limpieza industrial y operarios de bodega.
La demanda de estos puestos coincide con una oferta (también abultada) de desempleados dispuestos a ejercer estas funciones. El gran escollo es que, según indica la Fundación, "en la mayor parte de los casos se requiere experiencia y este hecho hace reducir considerablemente" el número de candidatos.
La construcción es otra de las áreas donde se ha cronificado el déficit de personal, así como la hostelería que, según la entidad, "es otro de los sectores que más mano de obra demanda". Por ejemplo, para cubrir puestos de cocinero, ayudantes de cocina, camareros, pasteleros, panaderos y recepcionistas.
La falta de personal ha empujado a la patronal a mejorar las condiciones socioeconómicas, pero aun así la oferta sigue siendo insuficiente para conseguir completar planteles. Sobre todo por "los horarios de trabajo, que requieren desempeñar las funciones en domingos y festivos" y por "las bajas retribuciones que ofrecen", manifiesta la entidad.
La organización advierte también que "se nota un ligero repunte" en la demanda de profesionales administrativos y que tanto el sector de la geriatría como el de sanidad continúan buscando personal. A nivel particular, durante el mes de julio la Fundación ofreció recursos a 341 personas desempleadas en la provincia de Pontevedra, de las que 94 lograron un puesto de trabajo.
CRECEN LAS AFILIACIONES. A nivel de afiliaciones a la Seguridad Social, Pontevedra se ha alzado como la provincia gallega donde se creó más empleo en el último mes, llegando a alcanzar los 373.106 cotizantes, la cifra más elevada que se registra a estas alturas del año desde julio de 2008.
Según los datos oficiales publicados ayer, el mes pasado se formalizaron 7.289 altas laborales, que elevaron el número de afiliaciones un 1,9%. Un crecimiento que, de hecho, contrasta frente al descenso de cotizantes del 0,04% que tuvo lugar a nivel estatal (donde la cifra de cotizantes ha bajado a los 20.340.964) y frente al repunte más contenido del empleo que sucedió a nivel Galicia (del 0,92% tras llegar a los 1.058.193 afiliados).
Un 16% menos de contratos, pero cinco veces más de empleos fijos
El impacto de la reforma laboral aprobada por el Gobierno central a finales del año pasado sigue dejando huella en el tipo de contrataciones que se están llevando a cabo en la provincia pontevedresa. La restricción de los contratos temporales continúa elevando el volumen de empleos indefinidos, hasta el punto de que uno de cada tres contratos firmados el mes pasado en la provincia fueron con carácter fijo.
Concretamente, según cifras facilitadas por fuerzas sindicales, fueron formalizados 12.205 contratos indefinidos, cinco veces más de los que se registraron hace un año. La cruz de la moneda es que, como contrapartida, el número de contratos descendió un 16%, pasando de los 41.366 firmados en julio de 2021 a los 34.526 rubricados el mes pasado.
La comarca pontevedresa mejoró incluso los datos del municipio capitalino, clausurando el mes de julio con 6.741 desempleados, un 2,5% menos que en junio. Los concellos que lideraron la creación de empleo fueron Poio (-63 desempleados), Vilaboa (-22) y Ponte Caldelas (-20).
Un 9,4% en O Salnés
Por su parte, la comarca de O Salnés experimentó un descenso del paro del 9,4%, que dejó el total de desocupados en 6.151. En este caso, los ejemplos más reseñables son los de Sanxenxo (que recortó la lista del paro en 150 personas), O Grove (-138) y Cambados (-104).
A nivel provincia, julio finalizó con 54.054 desempleados, un 1,6% menos que el mes anterior y un 8,8% menos respecto al mismo mes de 2021.
