La crisis del coronavius ha provocado el frenazo en seco del mercado laboral. Pontevedra acaba de cerrar el peor mes de su historia en materia de contrataciones. En abril de este año se firmaron 853 contratos en la capital provincial, lo que supone el dato más bajo desde que hay registros. Hasta ahora, la mayor caída se había producido en julio de 1999, cuando el número de puestos de trabajo creados se situó en 919.
Las estadísticas publicadas por la Xunta también vuelven a poner de manifiesto la precariedad en la que está instalada la clase trabajadora. El 91,3% de los contratos suscritos en Pontevedra durante el mes pasado fueron temporales, 785 en total. En esta misma categoría, 257 empleos son de carácter parcial, es decir, de baja remuneración y con fecha de caducidad.
El mercado laboral también incorporó a 64 pontevedreses con puestos fijos, que representan el 7,5% del total. De ellos, 45 fueron indefinidos a tiempo completo y 19 con una jornada inferior.
Además de la precariedad, una de las fotos fijas que deja el informe del mes de abril es que la mayor parte de las altas en la Seguridad Social se produjeron en personas con estudios básicos. El 61% de los nuevos empleos, 523 en total, fueron de vecinos con el certificado de escolaridad (302) o titulación de enseñanza obligatoria (221). El resto de contrataciones fue a parar, por este orden, a pontevedreses con FP (187), titulados universitarios (90) y Bacharelato o equivalente (41). Los doce restantes tenía otras titulaciones.
POR SECTORES. Por sectores, el de los servicios fue el que más tiró del carro. Seis de cada diez contratos, 530 en total, se formalizaron en actividades vinculadas a este ámbito. La industria concentró el 29,3% de los acuerdos laborales (250), seguida de la construcción (58) y la agricultura y la pesca (15).
Aunque el terciario fue el sector con más tirón laboral, lo cierto es que las profesiones que generaron más puestos de trabajo durante el mes pasado fueron los de la industria manufacturera: 246 en total. En este ranking le siguieron las actividades del comercio y reparación de vehículos, con 174 contratos; los empleos de administrativo (107); hostelería (66); construcción (58); actividades sanitarias y de servicios sociales (43); actividades artísticas, recreativas y de entrentemiento (33); transporte y almacenamiento (23) o empleos científicos y técnicos (22).
De 25 a 29 años
La franja de edad en la que se generaron más empleos, 163 en total, fue la de 25 a 29 años.
El ranking
El ranking de contratación masculina y femenina lo lideraron los peones de industrias manufactureras, seguidos de vendedores en tiendas y almacenes.
