Pontevedra ejercerá un mayor control sobre el consumo de agua

El Concello creará un sistema que vigilará en tiempo real el gasto de recursos hídricos del Lérez y de O Pontillón e impulsará acciones para sensibilizar a los vecinos ►Los técnicos valoran dos ubicaciones en el centro y cerca de un río para fijar la sede de este centro tecnológico
Captación de agua y bombeo en el río Lérez. GONZALO GARCÍA
photo_camera Captación de agua y bombeo en el río Lérez. GONZALO GARCÍA

El Concello ejercerá un mayor control sobre el consumo de agua. Y lo hará a través de la creación de un sistema que vigilará en tiempo real el gasto de recursos hídricos que Pontevedra capta del río Lérez y del embalse de O Pontillón. El objetivo de esta iniciativa es triple: corregir posibles fugas, detectar posibles enganches ilegales a la traída y mejorar el abastecimiento en toda la red, especialmente en aquellos servicios estratégicos, como pueden ser centros sanitarios o colegios.

El proyecto permitirá consultar en tiempo real los consumos ciudadanos y de los equipamientos municipales. Su diseño corre a cargo de Viaqua, la empresa que se encarga de gestionar el contrato del agua en Pontevedra.

La puesta en marcha de este servicio de digitalización irá acompañado del impulso de actividades para sensibilizar a los pontevedreses sobre el empleo del agua, que es un bien escaso. Ambos programas compartirán la misma sede.

Los técnicos estudian dos ubicaciones para la apertura de este centro tecnológico y de divulgación. Aunque evitó precisar qué emplazamientos se están analizando, Gulías sí avanzó que el equipamiento estará en el centro y al lado de un río.

La alternativa favorita del Concello obligaría a ampliar un inmueble y a estudiar su encaje legal a nivel urbanístico. En caso de que falle esta opción, se activará "un plan B, que xa temos".

El proyecto en cuestión buscará financiación europea a través de los fondos Next Generation. Y lo hará a través de las líneas que el Gobierno central activará para la digitalización y gestión de cuestiones que tienen que ver con el ciclo del agua. Este plan, que está pensando para los ejercicios de 2022 y 2023, está dotado con 3.000 millones de euros para iniciativas de toda España, incluyendo aquellas que supongan colaboración de la administración pública con empresas privadas.

LOS DATOS. El anuncio del nuevo proyecto fue acompañado de una batería de datos con los que el Concello presumió de la gestión del agua. Gulías aseguró que el municipio está "rozando a excelencia".

Pontevedra cerró 2021 con un buen índice de rendimiento de agua. El 91,11% del agua que se capta en el río Lérez o en O Pontillón do Castro llega a su destino. Gulías aseguró que este registro supera la media estatal, del 80%, según estudios realizados por la Asociación Española de Abastecimientos de Agua y por la Asociación Española de Empresas Gestoras.

El 8,89% restante son recursos hídricos no registrados. En este parámetro no solo figuran las fugas en la red de abastecimiento, que son la mayoría, sino también los enganches fraudulentos en la traída o el agua que se destina a las fuentes públicas.

La edil del BNG recordó que el nivel de pérdidas de recursos hídricos en Pontevedra está por debajo del 20% que la Xunta exigirá en la futura Lei do Ciclo da Auga. En la actualidad, la capital de las Rías Baixas superaría esa cifra (que es la que marca la Agenda 2030) en diez puntos, por lo que se libraría de sanciones en caso de que se apliquen penalizaciones.

LAS OBRAS. La red de abastecimiento de Pontevedra supera los 30.000 metros cúbicos de consumo diario de agua, lo que equivaldría a diez piscinas olímpicas. El sistema da servicio a la ciudad y a los municipios vecinos de Poio, Marín, Sanxenxo, Vilaboa y al polígono industrial de Ponte Caldelas.

El suministro pontevedrés ha sido objeto de distintas obras en los últimos años, todas ellas asociadas al nuevo contrato del agua, adjudicado a Viaqua por algo más de 129,14 millones de euros y un período de 20 años.

Entre las actuaciones llevadas a cabo desde que se declaró la pandemia mundial del coronavirus figuran la reforma de la potabilizadora del Lérez para evitar fugas. El proyecto costó 544.808 euros. A esta intervención se sumó una posterior, valorada en 320.000 euros, que consistió en la implantación de una nueva turbina en la estación, de modo que la instalación producirá su propia energía, reduciendo así la emisión de gases de efecto invernadero.

La estación de bombeo de agua potable de Monte Porreiro también inició el verano pasado con un sistema más eficiente. En este caso se invirtieron 857.503,94 euros en cuatro motores de succión para extraer agua del río gastando menos energía.

La concesión del agua, en manos de Viaqua, también lleva asociados 58 millones de euros para completar la red de saneamiento y abastecimiento en el rural, de los que faltan por gastar 14 millones. A mayores, el contrato incluye pequeñas mejoras que aún no han visto la luz, como la instalación de un cargador de móviles que funcionaría con energía hidráulica.


La capital tiene siete depósitos y prevé un octavo
Pontevedra dispone de siete depósitos de agua que dan servicio a la ciudad y a varios municipios limítrofes. El más antiguo, que se construyó en 1883, fue diseñado por el arquitecto Alejandro Rodríguez Sesmero en San Amaro. También cuenta con un tanque en Lérez, otro en O Castelo y dos en O Campiño. El más reciente, hecho en 2015, es el de Castro Senín, que dará servicio al Gran Montecelo. El octavo depósito se construirá en Valadares, Marcón.

44.500 m³
Los ocho depósitos tendrán una capacidad de 44.500 metros cúbicos, equivalentes a 15 piscinas olímpicas.

La polémica. Gulías reduce la falta de concesión de O Pontillón a un "trámite"

La edil acusa a la Xunta de usar esta situación como "excusa" para defender la captación de agua de Ence

La portavoz del Concello, Anabel Gulías, redujo este lunes la falta de concesión del embalse de O Pontillón a un "trámite administrativo que resolveremos e que non ten importancia". La edil del BNG respondía así a la crítica de Augas de Galicia, que la semana pasada informaba de que la presa de Verducido estaba en situación "irregular" al tiempo que afirmaba que reduciría el caudal a Ence.

Gulías acusó al Gobierno gallego de utilizar esta situación como "excusa" para defender la captación de agua de la pastera a través de una red que, según la nacionalista, presenta fugas. Los cálculos del Concello cifran en seis millones de euros los metros cúbicos de recursos hídricos que Celulosas pierde por el mal estado de su red.

O Pontillón se construyó en 1956 y en 2007 se abrió a otros usos deportivos.

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