De entre las siete grandes ciudades de Galicia, el concello capitalino fue el que más recortó la esperanza de vida durante el primer año de pandemia (2020). La previsión estadística de un promedio de vida de 84.53 años bajó hasta los 82.75 (un 2,1% menos), un índice al que solo se aproxima la provincia de Lugo (-1.82%), pero que encierra importantes matices.
Esa caída se produce en la esperanza de vida que se tiene al nacer, pero si uno acota el análisis a las edades más avanzadas, Pontevedra mejora sensiblemente sus resultados. Tanto, que fue la ciudad gallega que en 2020 rebajó menos la esperanza de vida a partir de los 80 años, pasando de un promedio de 10.59 años más de vida a los 10.43 (-1,5%). Un porcentaje que marca distancias mucho más amplias con el resto de grandes urbes de la comunidad, que en esta franja etárea rebajaron la esperanza de vida entre un 5,7% (en el caso de Lugo) y un 10.8% (en el caso de Ourense).
Lo mismo ocurre con la expectativa de vida en la población mayor de 65 años, en la que la Boa Vila también acaba en lo alto de la clasificación. De una previsión de vivir 22.07 años más a partir de la edad de jubilación se pasó a una de 21.51. Esto implica un descenso del 2,5%, que aún siendo negativo mejora los índices del resto de ciudades de la región, desde el 3,69% de Ferrol hasta el 6,26% de Santiago de Compostela.
El año con más fallecidos
El balance, publicado ayer por el Instituto Galego de Estatística (IGE), también incluye datos de 2021, en los que se puede ver que Pontevedra recortó ese año las previsiones de esperanza de vida a partir de los 65 y los 80 años (hasta los 21 y 9,65 años, respectivamente). Sin embargo, los datos también ponen de relieve que, junto a Vigo, Pontevedra fue la única urbe gallega que experimentó en 2021 un leve crecimiento de la expectativa de vida al nacer, situándose en los 82,81 años, la quinta marca más alta de Galicia después de los 83,73 de Lugo, los 83,54 de Vigo, los 83,58 de Santiago y los 82,91 de Ourense.
Estos últimos datos tienen especial relevancia si uno tiene en cuenta que, a pesar de que el covid no se encuentra entre las causas mayoritarias de fallecimiento, 2021 fue el año con más muertes de personas diagnosticadas de covid en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés: 149.
Tal y como subrayan las autoridades sanitarias, no todas estos decesos se pueden atribuir a la infección por coronavirus, pero en 2020 se contabilizaron 80 fallecimientos (69 menos) y en 2022 (cuyas tasas de mortalidad están por publicar), 122 (27 menos).
Tasa mortalidad
Desde el inicio de la pandemia se han contabilizado en el área sanitaria 353 fallecimientos de pacientes diagnosticados de covid, de los que dos han tenido lugar este año 2023. Esta cifra, comparada a los 78.232 contagios registrados, arroja una tasa de mortalidad del 0,45%, la más baja de entre todas las áreas sanitarias gallegas. En Ferrol y Ourense esa tasa llega al 0,76%.
Último parte:178 casos activos y 24 pacientes hospitalizados
El área sanitaria de Pontevedra y O Salnés se situó el viernes en los 178 casos activos de covid, ocho más que los comunicados en el parte anterior.
De estos, 24 permanecen ingresados en planta hospitalaria (aunque no todos a causa de la infección por coronavirus) y uno en la Unidad de Cuidados Críticos del Hospital Montecelo.
77.705 pacientes del área sanitaria que se han curado de covid desde el 8 de marzo de 2020, cuando se diagnosticó el primer caso en el Hospital Montecelo. El 54,8% han sido mujeres y 45,2% hombres. En estos casi tres años se han realizado en los distritos de Pontevedra y O Salnés 433.243 pruebas PCR, 293.617 test de antígenos y 144.417 pruebas diagnósticas de otro tipo.
