Pontevedra prepara un plan para luchar contra el feísmo urbanístico

El Concello hará un estudio para mejorar la imagen de la ciudad, con propuestas para muros y medianeras. También se prevé la supresión de vallas publicitarias
Uno de los trabajos se acometerá en los edificios que rodean la iglesia de A Peregrina. JAVIER CERVERA-MERCADILLO
photo_camera Uno de los trabajos se acometerá en los edificios que rodean la iglesia de A Peregrina. JAVIER CERVERA-MERCADILLO

El Concello prepara un plan para luchar contra el feísmo. Lo hará a través de un estudio que se contratará con dos objetivos. El primero de ellos será detectar aquellos puntos negros a nivel urbanístico en el centro de la ciudad. Y el segundo propondrá soluciones para mejorar la imagen de elementos como las medianeras o los muros.

El concejal de Urbanismo, Xaquín Moreda, anunció este jueves que el proyecto para detectar "as superficies verticais deficientes" tratará de implicar a los ciudadanos. "Queremos que sexa algo participativo e que os veciños fagan as súas suxerencias", apuntó.

Uno de los asuntos que abordará la iniciativa es el futuro de las medianeras de A Peregrina. En 2010, el Concello trató de mejorar este espacio a través de la convocatoria de un concurso público que premió las propuestas que mejor camuflasen las traseras de los edificios que rodean la iglesia. Su impulsora, la entonces edil de Urbanismo, la socialista Teresa Casal, no pudo sacarlo adelante. El plan se frustró, entre otros motivos, por el elevado coste de la actuación, valorada en unos 450.000 euros.

Aún así, el concurso se falló y un grupo de arquitectos de Madrid se hizo con la victoria. Su diseño, que denominaron Camaleón y que competía con otras 35 propuestas, consistía en crear una segunda piel en las fachadas que hay detrás del santuario utilizando láminas de madera de pino. Los ganadores cobraron los 15.000 euros del premio, pero no pudieron ejecutarlo. 

El Gobierno local es consciente de que una intervención en esta zona deberá contar con el visto bueno de la comunidad de vecinos al tratarse de una propiedad privada. También de la Xunta, porque cualquier actuación que se realice en la zona deberá contar con unos mínimos requisitos desde el punto de vista patrimonial. Moreda ofreció este jueves la "colaboración" del Concello, aunque recordó que el estudio que se encargue podría dar una solución distinta para estas medianeras. Por lo tanto, la posible aportación económica municipal no está garantizada. "Teremos que velo", aclaró el edil nacionalista.

El plan contra el feísmo también prevé la supresión de vallas publicitarias en el casco urbano. Para ello se tendrá que identificar cuántas instalaciones de este tipo quedan en la ciudad. "Son elementos que desentonan na zona urbana", comentó Moreda, que recordó que no se tocarán todas las estructuras. En principio, las situadas en las afueras podrán continuar donde están.

Una de las vallas que se quieren eliminar son las situadas en el Gafos, entre Alcalde Hevia y María Victoria Moreno. El Concello ya trató de desmantelarlas durante el anterior mandato, pero le resultó imposible porque los paneles publicitarios se encontraban dentro de una propiedad privada. 

En Pontevedra no existe una normativa municipal específica para regular estos carteles gigantes, que se han ido adaptando a las nuevas tecnologías (los menos) para ser más competitivos. En 2007, el Concello lanzó una ofensiva para retirar las vallas consideradas "ilegales". Se detectaron 150 rótulos situados en espacios públicos y zonas verdes cuya presencia iba en contra de las directrices del PXOM. Finalmente, el único logro de aquella campaña fue la retirada de las vallas situadas frente a la estación de autobuses. El resto de derribos -anecdóticos- se debieron a los efectos de los temporales o a la realización de obras, que obligaron a suprimir algunas de estas instalaciones. 

En la actualidad, Pontevedra cuenta con vallas publicitarias en Eduardo Pondal, en el barrio de A Eiriña, en la avenida de Vigo y en el entorno del río Gafos.

Comentarios