El Concello de Pontevedra se ha puesto manos a la obra para evitar futuras averías en su galería de servicios, situada en Orillamar. El concejal del Ciclo da Auga, Raimundo González Carballo, confirmó este miércoles que los técnicos de Viaqua trabajan a pie de campo para corregir las deficiencias detectadas en esta red. La zona de los trabajos se sitúa ahora frente al Gremio de Mareantes, lo que ha obligado a realizar cortes de agua para ejecutar las mejoras.
El principal problema del colector general que discurre entre las avenidas de Uruguai y As Corvaceiras es la filtración de agua del mar a través de los puntos de vertido y alivios que existen a lo largo del litoral pontevedrés. Así se lo comunicó Augas de Galicia al Gobierno local en un informe en el que enumeraba 72 deficiencias que instaba a corregir.
La mayor parte de estas anomalías son de carácter menor. Entre ellas figuran, por ejemplo, tubos con pequeñas filtraciones y arquetas rotas.
La Xunta marcó como "relevantes" 21 de estas deficiencias. "Están corrixidas case todas", aseguró González Carballo. "Non vai vir Augas de Galicia a saber como está a nosa rede. Sabémolo", añadió.
Las obras de reparación que ejecuta Pontevedra se realizan con cargo al nuevo contrato del agua, que Viaqua gestionará durante los próximos 20 años y que impone obligaciones económicas a la empresa para hacerse cargo del mantenimiento de la red de alcantarillado.
Los puntos negros en las tuberías de Poio y Marín suman 41 incidencias, de las cuales 22 son "relevantes".