La prolongada ausencia de lluvias obligó a la Xunta de Galicia a decretar la alerta extrema por sequía en toda la comunidad. A la espera de que las precipitaciones ayuden a recuperar el caudal de los ríos, el Concello de Pontevedra descarta aumentar las medidas restrictivas de urgencia en el consumo porque tiene garantizado el suministro con el actual caudal del Lérez y con el agua de reserva del embalse de O Pontillón de Castro.
De esta forma, si el trasvase de caudal del río Verdugo es la controvertida propuesta planteada por Augas de Galicia para resolver los problemas de desabastecimiento de Vigo y de la zona de la provincia, ¿cuál sería el plan al que tendría que recurrir Pontevedra en caso de que la sequía acabase dejando bajo mínimos el nivel del Lérez y del embalse de O Pontillón, al que el Concello recurriría en caso de extrema necesidad?
La respuesta es simple: a día de hoy no se contempla alternativa a esta "hipótesis extrema" porque "este supuesto nunca se ha dado ni en los años en los que la sequía fue similar a la actual", señala Casimiro González, técnico de Viaqua, empresa concesionaria del Servizo Municipal de Augas.
"Si la falta de lluvia acabase secando los ríos habría que traer agua en barcos", explica Casimiro González, técnico de Viaqua
El experto –que coincide con el Concello en enviar un mensaje de tranquilidad a los vecinos y empresarios al anunciar que no habrá cortes de agua ni para usos domésticos ni industriales– subraya que, aunque el nivel del río baje de tal forma que resulte imposible efectuar el bombeo hasta la estación depuradora de agua potable de Lérez, "contamos con el caudal que utiliza la fábrica de Ence y con la almacenada en O Pontillón de Castro". Puntualiza que, en caso de tener que echar mano de esta reserva (la alarma se activaría si este nivel de caudal medio estuviese por debajo de los dos metros cúbicos) "tendríamos garantizado el suministro durante 50 o 60 días" con el agua del embalse, que se encuentra a un 85,7% de su capacidad.
Casimiro González explica que la situación no resulta preocupante por cuanto el caudal del Lérez es de tres metros cúbicos por segundo y el consumo diario de los concellos que se abastecen de este río (Pontevedra, Marín, Poio, Sanxenxo y Vilaboa) es de 0,3 metros cúbicos por segundo. "Estamos consumiendo el 10% del caudal del Lérez sin necesidad de efectuar restricciones drásticas", subrayó el especialista que, de esta forma, refrendó el mensaje enviado el pasado martes por el concejal del Ciclo da Auga, Raimundo González, en el que anunciaba que "o nivel do Lérez, aínda que non é habitual nesta época do ano, non entraña ningún risco a curto prazo".
La presa, que está al 85,7% de su capacidad, permitiría el suministro durante 50 días después de que se agotase el agua del Lérez
Hipótesis improbable. Por su parte, el técnico de Viaqua indica que en la hipótesis "nada probable" de que la sequía acabe secando los ríos de Galicia "habría que traer el agua en barcos", una medida a la que, en su opinión, "nunca habrá que recurrir". "Con que llueva más de un día con cierta intensidad el nivel del Lérez sube muy rápido porque su cuenca fluvial es muy pequeña", estima.
En este sentido, aunque el frente que atravesó este jueves Galicia dejó precipitaciones leves al principio de la jornada y de intensidad moderada por la noche, el problema de la sequía no está resuelto porque el agua caída no es suficiente para recuperar el nivel de los ríos.
Según los últimos datos facilitados por el Gobierno local, el consumo de agua del Lérez se ha reducido un 17% desde octubre. El gasto medio, que se situaba en 32.825 metros cúbicos al día, ha caído hasta los 27.225 metros cúbicos en lo que va de diciembre, debido a la llegada del frío.
Las lluvias caídas ayer en Galicia y el paso de un sistema frontal previsto para la mañana de hoy no solucionarán la prolongada situación de sequía que vive esta comunidad ya que, según la predicción de MeteoGalicia, "a atmósfera tenderá a estabilizarse a medida que avance a xornada".
Según el organismo dependiente de la Consellería de Medio Ambiente, a medida que avance la mañana las lluvias irán desapareciendo, empezando por la mitad oeste, y a partir del mediodía el cielo quedará parcialmente nublado.
Las previsiones meteorológicas para lo que resta de semana anuncian, sin embargo, cielos muy nubosos y precipitaciones todos los días.
"Logo do paso dunha fronte o luns (día 11), que deixará precipitacións xeneralizadas, a partir do martes os ventos cambiarán de novo a norte e as chuvias terán un carácter máis irregular e intermitente, sendo máis probables na metade norte", subrayan los expertos de MeteoGalicia. También indican que las temperaturas mínimas experimentarán un moderado ascenso, mientras que las máximas no tendrán cambios significativos.
