Pontevedra tiene censados 15.653 perros, uno por cada 5 habitantes

Es la segunda urbe gallega con más densidad de población canina  El censo subió un 23% desde 2017 
Dos hombres y una mujer paseando por la Illa das Esculturas junto a dos perros. GONZALO GARCÍA
photo_camera Dos hombres y una mujer paseando por la Illa das Esculturas junto a dos perros. GONZALO GARCÍA

En Pontevedra hay más perros que niños. Según los datos facilitados a este periódico por la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, la ciudad capitalina tiene censados en estos momentos a 15.653 canes, un 60% más que la población menor de 12 años que estaba empadronada el año pasado (9.696).

Este fenómeno no es ni mucho menos exclusivo de la Boa Vila, pero una vez más Pontevedra se consolida como la segunda gran urbe gallega con más proporción de canes por habitante: uno por cada 5,3 (si uno toma como referencia el último padrón, en el que figuran 83.260 residentes).

De todas las grandes ciudades gallegas solo Lugo supera esta ratio con uno por cada cinco habitantes, mientras que por debajo se sitúan Santiago y Ferrol (uno por cada 5,8 personas), Santiago (uno por cada 6,2), Ourense (6,5), Vigo (6,9) y A Coruña (8,9).

Obviamente si se toman como referencia los números totales del censo autonómico el ranking cambia, hasta el punto de que la ciudad del Lérez pasa casi hasta el final de la tabla. La urbe con más población perruna es sin duda Vigo, con 42.780 canes, seguida de A Coruña (27.828), Lugo (19.411), Santiago de Compostela (16.694), Ourense (16.124), Pontevedra (15.653) y Ferrol (11.217).

Fuera de las que están consideradas como las siete grandes ciudades gallegas, destaca el caso de Vilagarcía de Arousa, que con 8.722 perros censados alcanzada la proporción de un can por cada 4,3 habitantes.

RAZAS PELIGROSAS. De los perros que están oficialmente censados en la ciudad de Pontevedra, 693 (el 4,4%) pertenecen a una de las 15 razas que la Xunta considera potencialmente peligrosas, entre las que se encuentran la American staffordshire terrier, Pitbull terrier. Dobermann, Dogo argentino, o Rottweiler.

El porcentaje de perros peligrosos respecto al total de población canina es de los más altos de Galicia. De hecho, solo lo superan Ferrol (con 699 perros de razas potencialmente peligrosas, que equivalen al 6,2% del total) y Vigo (con 2.079, equivalentes al 4,9%). No obstante, en este caso el cómputo podría cambiar a raíz de la ley sobre este tipo de animales que el Gobierno prevé aprobar en mayo, y que además de unificar normativa pretende fijarse más en el comportamiento individual de los animales de compañía en lugar de la raza concreta, con el fin de evitar prejuicios "injustos". 

OBLIGACIONES. La normativa autonómica en vigor obliga a los propietarios de los animales domésticos a garantizar que estén correctamente alimentados y que dispongan de buenas condiciones higiénico-sanitarias y medioambientales.

Además, la Ley 4/2017, de 3 de octubre, de Protección e Benestar dos animais de compañía en Galicia, establece que "la identificación de los animales de la especie canina es obligatoria sin excepción"; con carácter general dentro de los tres primeros meses de vida y, en todo caso, antes de ser objeto de transmisión. "Asimismo, serán objeto de identificación obligatoria todos los animales catalogados como potencialmente peligrosos", añade la Ley.

La norma sanciona el abandono animal, aunque lo cierto es que la protectora municipal de Os Palleiros sigue recogiendo año a año perros abandonados a su suerte. Incluso ha tenido que detener puntualmente las recogidas por colapso de las instalaciones.

Antaño la mayoría de la población canina residía en el ámbito rural, pero desde hace unos años el número de canes que viven en domicilios en el ámbito urbano ha ido creciendo. Sin ir más lejos, en 2017 estaban censados en la urbe pontevedresa 12.023 perros, un 23% menos.

Próximas actuaciones: Medio Natural promoverá la recogida de los excrementos en jardines

El Concello tiene todo a punto para crear el primer gran parque canino de la ciudad. Estará ubicado en los antiguos terrenos de Tafisa y se traducirá en la creación de un espacio de paseo y juego para perros que contará con diversos elementos de ejercicio, bancos, luminarias, fuente, papeleras y un cierre perimetral de malla translúcido.

El proyecto, para el que se han reservado casi 48.000 euros, solo está pendiente de que Costas dé el visto bueno para arrancar las obras, si bien el concejal de Medio Natural e Desenvolvemento Sostible, Iván Puentes, espera tener "pronto" novedades a este respecto. La idea es "comenzar tan pronto digan que podemos empezar, porque tenemos todo listo". 

La actuación tendrá continuidad con la creación de parques caninos de menores dimensiones en zonas de la ciudad en las que se percibe demanda de este tipo de espacios. Algo que también servirá de punto de inflexión para que la Concellería sea más exigente con la recogida de los excrementos en las zonas verdes. El socialista asegura que los orines no generan "tantos problemas" en los jardines como las cacas, porque salvo en zonas muy concretas que quedan quemadas por los pises, no suelen quedarrestos que generen olor. En cambio, en el caso de los excrementos la Concellería es conocedora de que hay zonas verdes en las que existen problemas a causa de la no recogida de este tipo de residuos, tanto a nivel oloroso como a nivel de lo molesto que resulta para otros particulares pisar excrementos.

Puentes incide en que la mayoría de los propietarios cumplen la norma, pero también incide en que existe una minoría que hace que las zonas verdes estén afectadas por este tipo de comportamientos incívicos. A ellos estará dirigida una campaña de concienciación que ya prepara Medio Natural y que pretende "ser más impactante que otras ediciones anteriores" para que los dueños de los canes recojan las cacas de los jardines.

La Concellería de Limpeza Viaria, que corre a cargo del nacionalista Raimundo González, es responsable de gestionar la recogida de los excrementos caninos en la vía pública y las aceras, aunque en este caso, según fuentes consultadas, no existe la previsión de impulsar ninguna medida nueva.

En todo 2020 solo dos sanciones por no recoger las cacas de perros
La Policía Local de Pontevedra tramitó el año pasado 64 infracciones relacionadas con perros y otros animales domésticos, de las que solo dos fueron por no recoger excrementos (algo castigado con entre 300 y 500 euros en función del ayuntamiento). En el caso de perros considerados potencialmente peligrosos, seis fueron por carecer de licencia, tres por abandono, tres por ausencia de microchip y dos por no disponer de cadena o bozal. En el caso de animales domésticos 12 fueron por carecer de cadena o bozal, doce por falta de chip, cinco por maltrato y tres por higiene.

396 intervenciones
En total los agentes de la Policía Local de Pontevedra realizaron a lo largo del pasado ejercicio 396 intervenciones con animales, en las que se incluyeron varios casos de perros abandonados, animales muertos o ejemplares sueltos, en los que no se llegó a tramitar denuncia.

1061
Es el número de llamadas que recibió el año pasado la Policía Local relacionadas con animales (45 menos que el año anterior). Algunas de estas tuvieron lugar durante el estado de alarma, en el que se permitió a los dueños de animales domésticos salir al exterior para que sus mascotas pasearan e hicieran sus necesidades.
Muchas otras llamadas fueron para poner en aviso a los agentes de la Policía Local de la existencia de canes en espacios públicos que vulneran la normativa, como por ejemplo cuando cierto tipo de ejemplares pasean sin correa o bozal.

Comentarios