En el momento en el que los ciudadanos tienen menor renta disponible, porque la inflación se ha tragado a estas alturas casi un 11% del poder adquisitivo de los ingresos medios de cualquier familia, el pago de impuestos está batiendo todas las marcas conocidas. Jamás en la historia Hacienda había recaudado tanto. A la caja de la oficina local de la agencia tributaria están entrando una media de 2,8 millones de euros cada día en el presente ejercicio. El año pasado la recaudación era de 2,18. Y en 2019 de 2,15. La subida, que a estas alturas de año acumula ya un 29,3%, se aproxima peligrosamente al 30%, es decir, casi tres veces más del 11,5% que marcó en julio la inflación en Galicia y de lo que ha caído la capacidad real de compra de las familias.
Cada 24 horas, los contribuyentes están aportándole a la caja fiscal este año 629.000 euros más de lo que ya pagaban antes de que el coronavirus lo cambiase todo.
De los tres principales impuestos a la hora de llenar la bolsa de Hacienda (IRPF, IVA y Sociedades), el que grava las rentas de las personas físicas es el más inflactado. Entre enero y julio de este año el IRPF recaudó un 44,3% más que en 2019 y un 15,4% más que en 2021. La oficina local tributaria lleva ingresado hasta el pasado 1 de agosto 265,7 millones de euros, prácticamente 1,26 millones de media al día. En 2019 la media diaria de recaudación fue de 0,8 millones.
El impuesto sobre el valor añadido lleva aportado a Hacienda desde la comarca pontevedresa 286,4 millones de euros entre enero y julio. Es un 23,6% más de lo que había recaudado en el mismo período de 2019, el último año fiscal sin pandemia, y un 24,5% por encima de lo aportado por los ciudadanos en 2021.
La contribución ordinaria de las empresas, en cambio, siguió un camino distinto. El impuesto de sociedades, que sirve para determinar el estado de la musculatura en la economía de autónomos, pymes y grandes compañías, ha caído en su recaudación. Este año, hasta el pasado julio, el tributo llevaba recaudado en Pontevedra 18,5 millones de euros, mientras que en los mismos primeros siete meses del año, durante 2019, aportó a las arcas de Hacienda 22,9 millones. Es decir, que la actividad de las empresas, o al menos su facturación a efectos fiscales, sigue todavía un 19,2% por debajo de lo que significaba el último ejercicio sin pandemia.
En toda España, los ingresos por impuestos suman 146.235 millones en los siete primeros meses del año, de acuerdo con los últimos datos facilitados desde la Agencia Estatal de la Administración Tributaria. El IRPF crece un 17,4% respecto a 2021 y el IVA, un 17,8%. Por sus rentas, los ciudadanos han dejado en las arcas de Hacienda 69.160 millones y en el impuesto sobre el valor añadido de las compras un total de 52.504 millones. Durante el mismo período de siete meses, en Galicia hasta el pasado mes de julio se llevaban recaudados 4.999 millones, un 12,6% más que en el ejercicio anterior.
Las previsiones de los expertos fiscalistas es que el ejercicio de 2021 será el que más recaude en Hacienda y que, a final de año, podría consolidar un aumento próximo al 30% respecto a 2021.
