Los concejales del Partido Popular de Pontevedra Pablo Fernández y Martín Martínez comparecieron este viernes para dar cuenta del estado de las obras de saneamiento y abastecimiento en el rural del concello. Fernández explicó que es elevado el número de vecinos de las parroquias que se ponen en contacto con la formación local en referencia a estas obras: "Están dejando a cientos de vecinos fuera del servicio de alcantarillado y abastecimiento, teniendo que hacer frente a un elevado coste para engancharse al servicio".
Los concejales han explicado que los problemas parten, entre otros, de que el servicio no se está prestando a las últimas viviendas de cada lugar, "debido a un mal estudio del trazado y la falta de voluntad para la ejecución y optimización de nuevos ramales". Además, decenas de vecinos, después de quedarse fuera del servicio, reciben cartas de la empresa encargada de las obras, Viaqua, con presupuestos que en algunos casos superan los 4.000 euros. "Estos enganches son obligatorios y, además, se amenaza con multas de hasta 10.000 euros".
"Hacemos un llamamiento a todos los vecinos del rural para que nos informen de su situación", dijo Fernández. "Queremos contabilizar y denunciar los cientos de casos, incluso miles, de vecinos a los que se les niega un servicio mínimo de saneamiento y abastecimiento y aquellos que tienen que hacer frente a un coste desproporcionado por realizar acometidas". Como ejemplo, Fernández aludió a vecinos de Tomeza, de Marcón y de Bora, donde este viernes mismo los populares se reunían con afectados para valorar las acciones que emprenderán.
"Después de 22 años en la alcaldía, hemos pasado de tener vecinos de primera y segunda, a tener vecinos también de tercera, que los dejan fuera de las conexiones a las redes básicas", aseguraron los concejales populares.
