Preocupación entre los residentes

PONTEVEDRESES EN CHINA ►Miedo al contagio, calles vacías y un país parado. Quien puede permitírselo, estos días prefiere pasarlos lejos de China. También los gallegos que trabajan allí. Muchos de ellos han viajado a Galicia y a que la epidemia se estabilice para volver a sus puestos de trabajo en el país asiático

Aunque no viven en el foco del coronavirus, la sombra de la epidemia sobrevuela China y los gallegos residentes en el país asiático muestran su preocupación ante un posible contagio. Las mascarillas y otras medidas preventivas no tranquilizan a quienes viven en China, donde ya han fallecido más de un centenar de personas y se han registrado más de 6.000 infecciones.

Por otra parte, las grandes aerolíneas empiezan a cancelar sus vuelos a China, tal y como hicieron el miércoles Bristish Airways, Lufthansa e Iberia, ante la propagación del coronavirus de Wuham, mientras agencias y turoperadores llaman a la calma, pero abogan por suspender o aplazar los viajes a ese destino previstos para las próximas semanas.

La suspensión de los vuelos de Iberia tendrá efecto desde el viernes, cuando estaba previsto el próximo, y durante febrero y a los clientes con billetes les ha ofrecido el reembolso o cambio de fecha.

PONTEVEDRESES EN CHINA

Sara Viñas, vecina de Meaño que trabaja en Shanghái
"Ao principio había controis térmicos nos bares, agora están pechados"

Sara Viñas, vecina de Meaño que trabaja en Shanghái. CEDIDA - InteriorA Sara Viñas la crisis del coronavirus la cogió gestionando un nuevo contrato con una empresa en Shanghái. Había terminado una beca en el ICEX y estaba gestionando su incorporación a la empresa privada cuanro estalló la epidemia. "Viñen a Meaño en decembro, que é cando rematei o contrato e comecei un mes de transición para a empresa privada, por iso as miñas non son unhas vacacións normais", explica. De momento, no ha comprado billete de vuelta a China. "Non sei aínda se vou poder reincorporarme ao traballo o 17 de febreiro, que era a data prevista", cuenta.

La joven, experta en comercio internacional gestionaba estos días su visado para poder volver a China pero los trámites administrativos están pendientes de resolverse. "Alí está todo parado, ao principio a xente saía e ía a lugares como bares ou discotecas, nos que xa se instalaron dende o principio controis térmicos para identificar á xente que tiña febre. Agora xa está todo pechado, a xente está recluida nas súas casas e só saen para ir ao supermercado", indica Viñas. Del mismo modo, asegura que sus contactos en China no se quejan de desabastecimiento en los supermercados.

"A xente está recluída e só sae para ir ao supermercado, aínda que os meus amigos me din que non hai desabastecemento"

La intertidumbre acerca de cómo se resolverá la epidemia no preocupa demasiado a Viñas. "É certo que, se non tes necesidade de ir é unha tontería coller un avión para entrar nun país con mascarilla e ter que estar recluído na casa, pero tampouco me asusta a idea de volver a China en, por exemplo, o prazo dun mes", indica la joven, que asegura que confía en los controles sanitarios que se están llevando a cabo por parte de las autoridades en el país.

De este modo, Viñas confía en que la situación no tardará en resolverse y se muestra optimista. "Vexo a xente moi preocupada, eu tamén o estou, pero non tanto. Pero que o virus irase controlando co paso das semanas e se seguen as medidas indicadas polos especialistas, como manterse no interior das casas ou usar mascarilla, non debería de haber problema", explica. Así, Sara Viñas explica que existe una página web en la que las autoridades informan del número de casos por zonas geográficas, así como de las muertes y el número de personas que se curan.


Mario Peso, pontecaldelano trabajando en Sichuan
"Se está pidiendo la compra a domicilio y la entrega se paga bastante más cara"

Mario Peso, pontecaldelano trabajando en Sichuan. CEDIDA - InteriorCalles vacías, mascarillas agotadas y desabastecimiento en los supermercados. Es el panorama que describe Mario Peso, pontecaldelano residente en China, con motivo de la epidemia por coronavirus. "Lo que me cuentan es que la gente no sale de casa, ni siquiera para ir al super, se pide que te traigan la compra o la comida a domicilio y se está pagando muy bien este servicio en agradecimiento al repartidor", explica el joven, que trabaja como entrenador en la ciudad de Kaijiang, en la provincia de Sichuan.

Sin embargo, Peso siguió la crisis china desde la distancia, ya que se encuentra estas semanas en Ponte Caldelas. Fue llegar a España y conocer lo que estaba ocurriendo. Mario Peso, pontecaldelano residente en China, donde trabaja como entrenador de fútbol a niños, estaba de vacaciones cuando comenzó la alerta en el gigante asiático. Al tener conocimiento de lo que estaba sucediendo en China, Peso acudió a Sanidad en España. "Fuimos yo y mi pareja para avisar de que veníamos desde China, para informarnos y saber si teníamos que hacernos alguna prueba". La respuesta les dejó más tranquilos, ya que al no tener síntomas les dijeron que no debían preocuparse.

"En general, las escuelas están cerradas en todas las ciudades del país y la gente que está trabajando lo hace desde su propia casa"

Peso tenía programado el viaje a Galicia desde un mes y medio antes de que estallase la crisis en China. "Se celebraba el año nuevo chino y todo el mundo está de vacaciones. Algunos de los gallegos que están allí aprovecharon para visitar países del sudeste asiático y otros, como yo, vinimos a junto de la familia", cuenta el joven Mario Peso.

La ciudad en la que vive está a unas tres o cuatro horas de Wuhan, el epicentro de la infección, pero aun así hay personas afectadas en todas las urbes del país. "En general las escuelas están cerradas y la gente no está yendo a trabajar, como mucho lo hacen desde casa", apunta Peso.

Por lo pronto, el pontecaldelano tenía previsto volver a China el próximo 5 de febrero pero ya ha cancelado su viaje. "En el trabajo tampoco me ponen problemas porque yo doy clases en colegios y estas se han suspendido, así que tampoco tengo que incorporarme al trabajo".