La procesión de los Dolores reactiva la Semana Santa

Decenas de fieles contemplan la segunda salida en solitario por la ciudad de la imagen de Nuestra Señora del Amor Hermoso
La Virgen del Amor Hermoso fue portada a hombros por ocho cofrades de la hermandad homónima. RAFA FARIÑA
photo_camera La Virgen del Amor Hermoso fue portada a hombros por ocho cofrades de la hermandad homónima. RAFA FARIÑA

Aunque los presagios matinales eran de cierto escepticismo, la lluvia dio un respiro por la tarde y permitió que decenas de fieles pudieran contemplar este viernes la segunda salida de la procesión de los Dolores, tras su estreno en 2019 y los parones obligados por la pandemia en los dos años posteriores.

La considerada como antesala de las celebraciones eucarísticas de Semana Santa anticipó el espíritu de religiosidad que vivirá Pontevedra a partir de este domingo, con un Domingo de Ramos absolutamente inusual, que no contará con la multitudinaria bendición de palmas y ramos en A Ferrería para acatar las recomendaciones sanitarias.

Como alternativa, cada parroquia ha organizado su propio acto de bendición entre la 10 y las 12.30 horas, por lo que la emblemática Burrita solo se dejará ver en Campolongo, que es donde se custodia todo el año.

Precisamente de San José partió este viernes en solitario la imagen de la Virgen del Amor Hermoso, tras la eucaristía de las 19 horas. La comitiva contó con la participación de varios cofrades de la hermandad homónima, entre ellos ocho costaleros que fueron los encargados de portar la imagen en a hombros, e integrantes de la banda de tambores y percusión.

El séquito pasó por Andrés Muruáis y Peregrina para desembocar en la Praza da Peregrina, donde se ofició un sermón, antes de emprender el camino de retorno por el mismo itinerario.