El tiempo no tuvo compasión con la procesión de los Pasos, uno de los desfiles religiosos más destacados de la programación de Semana Santa. La lluvia impidió la salida de las siete hermandades que durante meses se habían preparado para acompañar a las distintas imágenes procesionales en el desfile que debería haber partido a las 20.00 horas desde las inmediaciones de la Real Basílica de Santa María la Mayor.
La Junta Coordinadora de la Semana adoptó la decisión de suspender la procesión a las 17.00 horas, después de comprobar que las previsiones meteorológicas anunciaban que no cesaría la lluvia que había estado presente durante casi toda la tarde.
La Cruz Parroquial, el paso de la Cena (que iba a estar custodiada por la Cofradía del Mayor Dolor), el paso de la Oración en el Huerto y el Beso de Judas (hermandad de Nuestra Señora del Amor Hermoso), Jesús Cautivo y el paso de la Flagelación (Cofradía del Silencio y Orden Franciscana Seglar), paso de Jesús Atado a la Columna (Corpo Santo), paso del Ecce Homo (Espíritu Santo), paso de la Cruz a Cuestas (Cofradía de Nuestro Padre Jesús con la Cruz a Cuestas) y el paso del Santísimo Cristo de la Expiración y Virgen de la Soledad (Cofradía de la Vera-Cruz y Misericordia) esperaron hasta última hora para comprobar si el cielo daba una tregua que, finalmente, no llegó.
Tan solo la cofradía de la VeraCruz y Misericordia efectuó una mini procesión que salió desde el convento de Santa Clara (en concreto desde un local anexo) hasta la iglesia de San Bartolomé para trasladar la imagen del Cristo de la Expiración.
A pesar del mal tiempo los devotos abarrotaron la Real Basílica para participar en el acto eucarístico que se ofició a las 18.30 horas, en el transcurso de la cual tuvo lugar el ritual que recreaba el lavado de los pies que Jesucristo efectuó a los doce apóstoles en la Última Cena.
